Ricardo Sanz Wellington en Madrid

Desde el momento en que entramos al restaurante, la atención fue excelente. El personal estuvo pendiente de nosotros en todo momento, haciendo que la experiencia fuera muy agradable a nivel de servicio. Sin embargo, en cuanto a la comida, la experiencia no cumplió del todo nuestras expectativas. Esperábamos un nivel espectacular acorde al precio, pero lamentablemente los platos principales no estuvieron a la altura. Lo mejor de toda la comida fueron, sin duda, los postres, que sí destacaron por su sabor y presentación. Teniendo en cuenta que el precio ronda los 100 euros por persona, creemos que la relación calidad-precio no compensa. Es un sitio donde la atención es de 10, pero la cocina debería mejorar para estar al nivel que promete.

Desde el primer momento te sientes en casa gracias a la amabilidad del personal, y no puedo dejar de dar un saludo muy especial a Jorge, el encargado, que se lució cuidando cada detalle para que nuestra visita fuera inolvidable. El ambiente es súper acogedor y relajado, perfecto para disfrutar de una comida deliciosa y pasar un buen rato. Cada plato estaba lleno de sabor y presentado con mucho cariño, demostrando la pasión y dedicación del equipo. Si buscas un lugar donde la comida sea top y el trato, de primera, te recomiendo sin dudar. ¡Gracias a todo el equipo y, especialmente, a Jorge! volveré a visitarlo pronto.

Restaurante que solo sirve Menú Degustación, y viendo como está el mercado, es un menú degustación asequible y que merece la pena su precio. El local está chévere y Chicote se pasa a saludar (al menos esto sucedió un sábado) y te haces una foto con él.

Si piensas no comer en este restaurante cuando estés en Madrid mejor te vas de la ciudad...

¡Tuvimos una experiencia maravillosa gracias a Cedric! Fue increíblemente amable, siempre sonriendo y nos hizo sentir muy bienvenidos durante toda la noche. (Fue nuestra primera experiencia) Su orientación y atención realmente elevaron nuestra velada y mi noche de cumpleaños. Un servicio fantástico, ¡gracias!

Este sitio garantiza un espectáculo de sabores. Cada plato es una experiencia que te lleva al mismo Japón. Eramos un grupo de Canarias y disfrutamos plenamente cada bocado y cada momento. Gracias.

El menú del chef ha sido una experiencia de nivel superior, lo recomiendo para disfrutar al máximo la visita. Por mencionar uno de los platos, el sashimi de salmonete nos ha encantado tanto por su sabor como por su presentación, así como el erizo. El corte de pescado blanco con la flor eléctrica ha sido una sorpresa para el paladar que, una vez adormecido, eleva todos los matices del maridaje. También merece mención el servicio, todo el personal ha sido muy atento y nos ha informado con detalle. Repetiría sin dudas; no es para todos los bolsillos, pero la ocasión lo merecía.

Ambiente muy tranquilo y cómodo, en cuanto a la comida nos esperábamos algo mejor, probamos algún que otro nigiri que dejaron bastante que desear. En un restaurante como este, vas con las expectativas bastante altas, te esperas que todo sea correcto, en nuestro caso uno de los nigiris que nos sirvieron nos fue incomestible. Después de comer ese nigiri a mi pareja le fue imposible seguir comiendo, menos mal que era ya el último… a falta de los temakis, pero uno de los temakis tuvimos que cancelarlo por no poder comerlo de la fatiga que le entró. El nigiri en concreto fue el de wagyu, no estaba flambeado ni nada, ni se deshacía en la boca… no lo recomendamos para nada. El resto de la comida estaba muy rica, los platos de usuzukiri buenisimos, el tartar, el resto de nigiris, se ve que el pescado es de calidad y saben tratarlo. No es un restaurante al que volveremos, hay muchas más opciones del estilo que nos han gustado más que este.

Un gran restaurante que sigue teniendo la frescura y buen sabor de siempre. El servicio muy atento y la comida insuperable

Como era de esperar todo de gran calidad y trato exquisito, el menú degustación variado y original, aunque por primera vez tengo la sensación de que merecería más la pena pedir a la carta. El menú degustación es amplio y variado, aunque notamos escaso el maridaje (en cuanto a la cantidad que se servía, no así en cuanto a la calidad y variedad que era excelente). En resumen: si es la primera vez que se va el menú degustación puede tener sentido, no así el maridaje. Repetiremos para probar la carta y/o la barra de sushi. El personal como es normal en estos sitios maravilloso, extremadamente atento y amable.