Hotel Restaurante Alahuar en La Vall de Laguar

Comida excelente,la atención igual Para repetir

Lugar ideal para descansar y desconectar, comida buenísima, todo en general, lo recomiendo

Hemos estado solo un día y estamos muy gratamente sorprendidos. El entorno y la ubicación de lujo para desconectar. Llegamos tarde para comer y aun así nos atendieron y alucinamos con la cocina que tienen. El desayuno una pasada, todo de primera calidad y un servicio cojonudo. Además tienen para cargar vehículos eléctricos. Repetiremos más días. Gracias a todos!!

Hemos visitado este hotel en varias ocasiones y, como siempre, el paisaje y las vistas son inmejorables, un auténtico placer para desconectar y disfrutar del entorno. La comida del restaurante sigue siendo excelente, con platos bien elaborados y un servicio muy atento y rápido. Sin embargo, en esta ocasión la limpieza del jacuzzi de la habitación dejó mucho que desear. Nos lo encontramos sucio y, lamentablemente, nos tocó limpiarlo a nosotros, lo que hizo que no pudiéramos disfrutar del baño relajante que tanto esperábamos. Lo comentamos en recepción, pero quedó en una simple anotación, lo cual nos sorprendió un poco teniendo en cuenta el nivel habitual del hotel. A pesar de este inconveniente puntual, sigo considerando este hotel un lugar muy recomendable, sobre todo por su ubicación, el entorno y la calidad gastronómica.

Espectacular, el servicio, el lugar y la comida.... Gracias mil

Hotel ubicado en un montículo aislado del pueblo en el que se respira mucha calma, con encanto. Con unas vistas impresionantes al Valle de Laguart para amantes de la montaña y la naturaleza, muy tranquilo, acogedor, con una piscina al aire libre; la amabilidad del personal también cabe destacarla, en recepción nos obsequiaron con una copa de cava de bienvenida. En el restaurante, música ambiental; el primer día nos encantó la comida, tanto en sabor como en la presentación de los platos, cuidando todos los detalles. Pero el día de la salida que era Lunes decidimos comer allí antes de irnos, no sé si cambió el cocinero pedimos "arroz del señorito" aparte de otros platos y no valía nada. Las vistas nos compensaron. Hotel ubicado en un montículo aislado del pueblo donde se respira mucha calma, con encanto. Con unas vistas impresionantes al Valle de Laguart para amantes de la montaña y la naturaleza, muy tranquilo, acogedor, con una piscina al aire libre; En el restaurante, música ambiental; el primer día nos encantó el menjar, tanto en sabor como en la presentación de los platos, cuidando todos los detalles. Pero el día de salida que era Lunes decidimos comer allí antes de irnos, no sé si cambió el cocinero pedimos "arroz del señorito" aparte de otros platos y no valía nada. Las vistas nos compensaron. Con unas vistas impresionantes al Valle de Laguart para amantes de la montaña y la naturaleza, muy tranquilo, acogedor, con una piscina al aire libre; En el restaurante, música ambiental; el primer día nos encantó el menjar, tanto en sabor como en la presentación de los platos, cuidando todos los detalles. Pero el día de salida que era Lunes decidimos comer allí antes de irnos, no sé si cambió el cocinero pedimos "arroz del señorito" aparte de otros platos y no valía nada. Las vistas nos compensaron.

Lo mejor de guill plaza el tinto de verano con espuma de limon... Entre otras cosas. Los nachos pa chuparse los dedos.. Si vienes pruebalo!

Un hotel con encanto en una ubicación increíble. Además, quedamos muy sorprendidos con el buen trato y atención por parte de todo el personal. ¡Volveremos seguro!

Ayer una vez más fuimos a comer al Rest. Alahuar (4 personas). La comida excelente, el ambiente y el precio insuperable pero lo que más nos gustó fue la atención. Un 10 /10 con mención de honor!

El restaurante del Hotel es grande y hacen varios turnos de cena. El menú tenía muchas opciones de primeros, segundos y postres, a cual más rica. Estuvimos tres noches y probamos casi todos los platos. Te asesoran con las alergias alimentarias y habían varios postres para elegir sin gluten.