Enbable en Madrid

En Embable siempre se come bien, pero lo de hoy ha sido extraordinario. Quiero destacar especialmente la profesionalidad y el trato impecable de Patricia, la camarera de barra. Atenta, amable y con una calidad humana que marca la diferencia desde el primer minuto. La cocina es una maravilla: los callos espectaculares, el pulpo en su punto, la ensaladilla de las mejores que he probado en Madrid y los huevos rotos con carabinero, sencillamente impresionantes. Además, la selección de vinos es de una calidad altísima y se nota el cuidado con el que la trabajan. Embable es uno de esos sitios a los que vuelves porque te hacen sentir bien, porque te atienden mejor y porque la experiencia siempre merece la pena. Un lugar que recomiendo sin dudarlo, con un agradecimiento especial a Patricia por elevar cada visita. todo los callos, el pulpo

Una experiencia estupenda, como siempre.

Visitar Enbable en Madrid es encontrarse con un espacio donde la gastronomía moderna se disfruta sin prisas y con una sonrisa. Desde el momento en que se cruza la puerta, el ambiente cálido y bien cuidado transmite una sensación de comodidad que invita a quedarse. La decoración combina elegancia y cercanía, creando un entorno perfecto tanto para una cena tranquila como para una ocasión especial. La carta es uno de sus grandes aciertos: platos pensados con mimo, presentaciones impecables y una mezcla de sabores que sorprende sin caer en excesos. Cada bocado parece diseñado para que el comensal descubra un equilibrio entre creatividad y tradición. Destacan especialmente los entrantes, que funcionan como una pequeña muestra del estilo del restaurante, y los principales, con ingredientes de calidad tratados con respeto. El servicio merece una mención aparte. El equipo de Enbable se muestra atento sin resultar invasivo, siempre dispuesto a explicar un plato, recomendar un vino o adaptar la experiencia a las preferencias del cliente. Esa profesionalidad amable marca la diferencia y hace que la visita se vuelva memorable. En conjunto, Enbable es un lugar al que apetece volver: cocina bien ejecutada, ambiente agradable y un trato que hace sentir al cliente verdaderamente bienvenido. Una opción sobresaliente para disfrutar de Madrid desde la mesa.

Muy buen restaurante con un servicio impecable

Cuando tengáis esos días en los que penséis que nada funciona, que no hay nivel, que nos vamos a la *, esos días que cada vez son más frecuentes por desgracia, coged metro/taxi o dad un paseo y venid aquí, hacedme caso. Este sitio os volverá a reconciliar con el mundo. Desde que entras hasta que sales, vives una experiencia que te hará volver a creer en la humanidad. Servicio profesional, calidad de producto, ambiente moderno sin perder el toque clásico, y un lugar donde se demuestra que la hostelería requiere de profesionales con nivel y cualificados, (camareros, cocineros, jefes de sala) y gerentes que sepan de qué va este negocio. He probado todos los restaurantes de este grupo hostelero, y se nota que es una máquina bien engrasada. Gracias!

Trato del personal excelente.Ambiente muy acogedor.Y la comida exquisita.Calidad-precio muy buena.Recomendado 100%.Volveremos sin dudarlo!.

Excelente cocina en calidad, elaboración y cantidad con detalles de la casa como aperitivo y con el café. Servicio próximo, eficaz y muy amable. Perfectamente accesible para personas con movilidad reducida PMR como yo. Sin duda volveremos. Punto de mejora: Hacía un poco de frío por estar la mesa al lado de la puerta a pesar que intentaron cerrarla lo más posible.

Muy buena comida, es la segunda vez que voy y repetiré.

Buenos todos los platos ,la caña en la barra la mejor del barrio una bu6 tapa,y bien tirada y solo 4 euros

Dispone de una terraza cómoda, bien situada, con un servicio muy eficiente y educado y, lo que ya se está perdiendo, este local obsequia a los clientes con tapas de cortesía variadas y sabrosas.