Casa Carola en Madrid

El cocido madrileño que todo el mundo debería probar.

Inmejorable si quieres comer cocido de calidad. El servicio también de 10. Repetiremos.

Las dos horas que cubre la mesa reservada en el primer turno se hacen cortas para degustar los tres vuelcos del cocido servido en la Casa Carola, y que también incluye un vaso de cava y una croqueta para empezar y un postre para terminar. Todo muy rico y recomendable. Trato muy familiar pero imprescindible reservar y con antelación suficiente, ya que suele estar lleno.

Brutal de bueno fuimos hace un par de semanas y me pareció un espectáculo, comimos súper bien el cocido y las chicas un encanto buen servicio.

Un sitio de tradición , donde el cocido debe de ser un básico madrileño

Nos atendieron muy amablemente, ya que no hablamos bien español. La comida es de primera y puedes pedir lo que quieras. Incluye un postre delicioso. Auténtico, honesto y extremadamente delicioso. Una visita obligada.

Si los garbanzos hablasen, seguro que pedirían nacer aquí. ¡Madre mía, qué cocido! Entrar en este sitio es como entrar en el salón de tu abuela, pero con más alegría, más chispa y menos broncas por no comerte la verdura. Desde que me senté, ya iba con sonrisa; y a medida que iba saliendo la olla, la sonrisa se me dibujó de puro disfrute. El cocido, espectacular. Garbanzos tiernos, como si hubieran ido a un spa de dos días; la sopa, calentita y reconfortante, te puedes echar toda la que quieras y repetir , que abraza el alma como una manta en invierno; las carnes, generosas, con ese sabor que solo se consigue cuando el cocinero le pone paciencia, cariño y seguramente algún secreto familiar que no se cuenta ni bajo juramento. Estuve apunto de pedirle un autógrafo al chorizo. Fue una experiencia gastronómica y social, porque aquí no solo se come, se comparte, se disfruta y hasta se conspira sobre cuándo volver. De tantos cocidos que he probado en mi vida (y no han sido pocos, créeme), este está en el Olimpo de los guisos. Y mira que he estado en sitios, pero aquí hay algo especial: será el ambiente, será el cariño con que lo hacen, será que los garbanzos han pactado con los dioses… pero este lugar te atrapa. En resumen: si quieres salir rodando de felicidad, con la tripa contenta y el corazón lleno de alegría, este es tu sitio. Y que nadie se engañe, aquí el cocido no se come… ¡se vive! Gracias a todos os recomendaré y volveré !!

Delicioso cocido!!!! Excelente servicio.

Sin duda uno de los mejores cocidos de Madrid! La atención maravillosa de todo el personal, opción de cocido Sin Gluten previo aviso, sin duda volveremos!

Este sitio para comer es ideal, el trato mejor imposible y la comida espectacular, el trato mejor imposible sobre todo darle las gracias a Juanjo