Los mejores restaurantes de otras cocinas españolas en Mondragón

10/08/2025: Hemos ido de casualidad. Yendo hacia San Sebastián buscábamos algún lugar con encanto. Y nos ha sorprendido. Las vistas espectaculares. El caserio muy bonito. El servicio estupendo y lo principal, la comida, fantástica. Una suerte haberlo encontrado.

06/08/2025: Buscando algún sitio para comer por la zona y acertamos de pleno ! La comida maravillosa , tanto en elaboración de alguno de los platos , como en producto Servicio cercano y profesional ( tardaron un poco en servir los principales ) Para repetir sin ninguna duda Gracias por el buen rato !

19/08/2025: Ubicado en el centro de Mondragón, el hotel ha sido recientemente renovado y las habitaciones son amplias. El wifi es bastante bueno y hay una pequeña nevera. Lamentablemente, el espacio en el armario es limitado. El desayuno también es bastante bueno.

19/08/2025: Este verano decidimos conocer el País Vasco y encontramos por casualidad este hotel. Qué gran sorpresa! Es precioso, muy limpio, con habitaciones amplias, buena comida... pero ante todo he de destacar la amabilidad y maravilloso trato recibido por todo el personal de este hotel. Fuimos con una bebé de dos meses y nos facilitaron la estancia con mucha cercanía. Volveremos sin dudarlo!

12/08/2025: Una experiencia horrible, maltratados y ninguneados. Tras hacer una reserva fuimos ignorados por 20 minutos, al reclamar por tercera vez la mesa que teníamos reservada se nos invitó a sentarnos en una mesa sucia en el exterior, con una tormenta inminente. Han sido groseros y han terminado por invitarnos a irnos pues solo nos ofrecía una mesa sucia bajo la lluvia. Que no os engañen las vistas, pues ni ellas podrán endulzar la amargor del servicio.

12/08/2025: Reservamos mesa para las 21:00 con la ilusión de una cena especial. Sin embargo, la noche decidió contarnos otra historia: nos dejaron de pie, como meros espectadores de un banquete al que nunca fuimos invitados. Tres veces preguntamos, tres veces nos respondieron con el silencio más elocuente. Media hora de espera, 15 kilómetros desde casa y la certeza de que no éramos bienvenidos. Nos fuimos con el estómago vacío, pero con una lección aprendida: hay lugares donde el hambre no es de comida, sino de respeto.