Los mejores restaurantes de cocina mediterránea en Cantabria
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Cafe Cantabrico
Noja
13/08/2024: Cenamos genial. La primera vez pedimos hamburguesa, estaba buenísima. Y la segunda unos sándwiches y unas patatas con salsa, muy bueno también.
Aunque hay cola para entrar, va muy rápido y el trato de la chica que te sienta es muy agradable.
Repetiremos seguro!
28/06/2024: Acabo de estar cenando una hamburguesa y no me ha gustado nada. Hamburguesa bastante mala y el trato de la chica de la barra muy desagradable. Le he preguntado al pedir si me podía cambiar la salsa barbacoa picante que llevaba la burger por salsa barbacoa normal y me ha dicho que me la cobraba, de risa.
No volvemos.
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Casa Augusto
Corvera de Toranzo
14/11/2024: Comida casera rica, precio menú 24 € caro. El dueño sólo amable con amigos y conocidos, con el resto un poco borde, que copie de la señorita que atiende en sala, todo es amabilidad.
07/10/2024: Todo riquísimo: las alubias con chorizo, el lechazo asado, el cocido montañes, la menestra, la merluza a la romana, el helado de queso.... Además son encantadores. Seguiremos yendo casi a diario mientras estemos por aquí.
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La Cubierta - Gran Hotel Victoria
Santander
09/09/2024: Hace mucho tiempo que no salgo tan satisfecho de un restaurante. A pesar de llegar un poco tarde y sin reserva, nos atendieron fenomenal, comimos de menú y recibimos un servicio de primera.
Muchas gracias
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Bar Julia
Santa Cruz de Bezana
18/05/2024: JULIUCA, “Gracias por atendernos”
Coordenadas para dejar el coche cerca del aparcamiento cercano N 43°27'39.8" W 3°53'12.9"
Por casualidad, he reparado que, el por muchos conocido “Bar Julia” de San Cibrián, localidad del Ayuntamiento de Santa Cruz de Bezana en Cantabria, estaba en Google Maps siendo reseñado por clientes, conocidos, amigos etc. Entrando y leyendo las reseñas, me he enfadado un poco, con todos mis respetos a sus publicadores, viendo que es nostálgico, un poco viejo, pero bien el estanco y las horas de los blancos, le dan mucha vida, buenos precios, un poco de terracita, típico bar de pueblo, buen blanco, buen blanco y buen blanco y vaya hombre, hay UNO que habla del “encanto de la persona que está al frente: “LA SEÑORA JULIA” (Con todas las mayúsculas del mundo la nombro). Se me olvidaba, de las quince reseñas, solo 8 incluyen comentario, las demás puntúan con sus estrellas, pero sin explicar el por qué. ¿Tanto nos cuesta poner algo?
Intentaré restañar los olvidos en los comentarios anteriores, aflorando a quien se merece al menos en cada aportación, haber salido su nombre a relucir y que lo haga, como uno de los mayores luceros que podríamos ver en nuestra Región, que hay muchos y anónimos, deseando haya valientes que les den también nombre y lugar de encuentro a través de este medio o del que mejor controlen, pero por favor, no tardéis ni les dejéis en el olvido, ahora que ellos lo pueden leer.
¡¡¡ VAMOS A ELLO !!!.
“JULIA”, bar alegre en el que cada persona, cliente o no, recibe a su llegada un buenos días o buenas tardes tanto del personal que lo atiende como de los clientes ya atendidos.
“JULIA”, bar con muchísima solera (que no viejo), Wifi gratis y con recursos propios que le auguran mucha vida.
“JULIA”, ciertamente con buenos precios y su terracita en la que al sol se está de lujo al amparo del Nordeste y que no todos los bares de pueblo tienen.
“JULIA”, nominada mayoritariamente hasta hoy por el mejor blanco de solera de la Región, por su estanco y su amplio horario de atención.
“JULIA”, bar-tienda con el encanto de “ELLA” al frente.
Más o menos, como unos 88 Noviembres, que son los que su DNI dice que tiene, atienden nada más llegar y en muchos de los casos, sin preguntar, ya sabe lo que quieren. Son clientes. Son amigos.
La pidas, lo que la pidas, una cajetilla de esto, una de lo otro, un librito, picadura de esto, un vino, una caña, unas patatas y un pan, en cuanto la preguntas, ella, sin papel ni calculadora electrónica, únicamente con su cabecita despejada, te dice exactamente el importe de lo que ya tienes en el mostrador.
Por las mañanas, lista como el ajo, hábil y rápida, encuentras a su fiel reflejo de juventud, con un desparpajo e igual rendimiento que su abuela: Su nieta “PAULA”, va de extremo a extremo del largo mostrador, atendiendo con una sonrisa al personal que acude sin descanso. El botellín de blanco de solera con su vaso incluido, forma parte del ritual mañanero, independientemente del continuo despacho de las más de cincuenta variedades de tabaco que observamos desde nuestra posición, así como de los detalles de tapas variadas con las que nos hace más llevadero finalizar las consumiciones.
Por la tarde, las mesas se verán ocupadas por simpáticas y a veces ruidosas partidas de “Domino”, “Mus”, “Tute” o “Flor”, haciendo que las tardes sean amenas y divertidas en este local.
Limpio a cualquier hora de la mañana, tarde o noche, demuestra que las personas que lo llevan, tratan con mimo a su clientela.
Da igual cómo te llamen, “JULIA” – “JULI” – “JULIUCA”, tu siempre con tu temperamento, con tu humor y tu buen hacer, tirando del carro día a día…
“GRACIAS POR ATENDERME”