Unas Chung Lee en Madrid

Es lo mejor de lo mejor el precio está bien por el espectáculo q te ofrecen y unos pedazos de cubatas.

Siempre es muy buena opción sobre todo cuando los sitios del centro de Madrid en verano están a reventar.

Estoy ahora mismo aquí en un evento que se anunciaba The Perreo: Reggaeton Old school. Si tenéis más de 30 años no vais a conocer más de la mitad de canciones que esperáis escuchar, el dj no había nacido.

Ha perdido originalidad comparado con "Medias Puri".. pero no está mal para pasar una buena noche!

Servicio estupendo!!! Uñas preciosas a muy buen precio

Bestial!!! La DJ es asiática y la mezcla es increíble. El ambiente tranquilo, sin malos rollos, la gente va a su bola y está pasándolo bien!! La edad media+25

Sala de discoteca pequeña, pero agradable. Con música actual y cortos espectáculos. Si quieres te pintan las uñas de forma gratuita y la cara, pero es lo hacen rápido y a oscuras.

Fuimos sin saber muy bien qué esperar, más por curiosidad que por entusiasmo, y acabó siendo una de esas noches que se te quedan grabadas. Desde la entrada ya se notaba que el sitio tenía su propio lenguaje: luces tenues, gente diversa, y una atmósfera que parecía suspendida en otra frecuencia. No era el típico lugar con pretensiones ni postureo. Aquí todo fluía con una naturalidad que se agradece, desde la música hasta las conversaciones. La selección musical no seguía fórmulas comerciales, y eso se notaba —se sentía más como una sesión curada con cariño que una lista genérica. El sonido envolvente, sin apabullar, permitía moverse sin perder el hilo ni quedarte sordo. Lo mejor, sin embargo, fue la vibra de la gente: cero juicios, cero tensiones, todo el mundo en su rollo, pero compartiendo el espacio con respeto. Me llamó la atención cómo se mezclaban estéticas, edades y formas de bailar sin que nadie pareciera fuera de lugar. Hasta el personal de barra parecía sincronizado con esa especie de anarquía armónica que reinaba en el ambiente. Salimos con la sensación de haber vivido algo distinto, sin filtro, sin fachada. No sé si repetiríamos cada semana —porque también tiene algo de ritual raro—, pero desde luego es un sitio al que volver cuando necesitas reconectar con el caos bonito.

El precio es elevado pero viene con copa y con un "descuento" de 3 euros para su mercadillo donde puedes acabar la noche con unos noodles que justo cuestan eso. La música a veces es un poco demasiado para guiris pero ponen de todo y eso se agradece. No está súper lleno y se puede bailar agusto y pasarlo bien! Los espectáculos bastante sin más.

De precios bien, y el show bien también, pero la música un poco bajón