Taller Arzuaga en Quintanilla de Onésimo

Una experiencia magnífica. La comida espectacular. El espacio, aún siendo agradable, podría ser algo más acogedor.

En general muy bien, el hotel y la experiencia completa. Sin embargo, algunos algunos detalles de cortesía, que si has cogido un paquete, deberían tener en cuenta. La visita guiada con Pablo es excelente. Muy porfesional. En el taller, en la cata gran reserva, la atención de Irene y verónica excelente. Irene muy profesional y verónica empática y amable. Lo único que no nos agradó, la atención de Alejandra, de mala actitud y que nos cobraran una menta poleo fuera del paquete contratado.

No puedo más que decir que todo ha sido de 10. Hicimos reserva un grupo de 4 personas y quien la hizo olvidó mencionar las restricciones sin gluten. Sin leche y sin cárcel de uno de los comensales. Cuando lo hicimos nos pidieron esperar 15 minutos para acceder al restaurante ( accedimos gustosamente), y tras ello adaptaron completamente el menú que además fue delicioso y maravilloso. Muchísimas gracias. Tenesis 5 estrellas y lamento que no haya más.

Ya la entrada te sorprende. Elegimos el menú gran reserva, el cual empiezas en la cava, continuas en barra frente a cocina junto a la chef y terminas en tu mesa. El espacio es muy amplio sin mesas demasiado juntas que te da privacidad y la decoración, de noche, es muy bonita. El menú largo, de calidad y muy estrella michelin, un punto a nuestro favor es que los postres no eran pesados sino digestivos perfectos para acabar nuestro menú. El servicio de 10, sin atosigar pero siempre pendientes. En cuanto a la bebida empezamos con un vino gran reserva Arzuaga que queríamos probar y seguimos con una gran recomendación de la sommelier que acertó totalmente con nuestro gusto. Una gran sorpresa en la ribera del Duero.

Espectacular comida de pasos armada con precisión . Todo fue delicioso.

Una experiencia increíble, ni siquiera tuvimos que reservar para un restaurante Michelin, eso es raro, incluso nos tomamos fotos con los chefs, me encanta, el mejor restaurante al que he ido.

Tomamos el menú degustación gran reserva. El restaurante precioso y comida exquisita, todos los platos sin excepción riquísimos. Servicio muy bueno y atento. El motivo de no poner un 5 de puntuación es porque en estos restaurantes no puedes salir con ningún “pero” y en este restaurante nos chocaron 3 cosas. Primero que aunque no habíamos pedido maridaje (pedimos botella de vino de la carta), en restaurante de similar categoría y superior te sirven agua como incluida en el menú, aquí no. Tras un menú bastante largo te ofrecen antes de los postres degustación de quesos, que tiene que ser a mesa completa y de todos los quesos sin opción de probar alguno de ellos por alguno de los comensales. Por último, en vez de comentar si quieres café o infusión, te traen la carta y parece un poco brusco. Pedimos café que aunque estás en un estrella Michelin nos pareció de precio excesivo para la calidad tenía (4€ un expreso y 5* un capuchino sin nada del otro mundo ninguno). En restaurante similares en Burgos y Madrid tanto agua como café/infusiones te lo incluyen dentro del propio menú.

⭐️⭐️⭐️⭐️⭐️ 9,5/10 ✅ Fabulosa experiencia gastronómica en la que pasas por distintas partes del restaurante (cava, barra y mesa). Mucha amplitud, con buenas vistas y ambiente muy agradable. ✅ Restaurante con estrella michelín que acepta niños y bebés. Esto es remarcable porque no son muchos los que te dan esta opción. Puedes pedirles comida del otro restaurante. ✅ Personal super amable y atento tanto con nosotros como con el niño. Un equipo de 10. ✅ La comida toda muy buena. Pedimos el menú largo y estuvo todo perfecto. Adicionalmente pedimos la degustación de quesos que nos ofrecieron y que se cobra aparte. Muy recomendable.

Excelente, disfrutamos del Menú Gran Reserva , platos exquisitos y atención amable en un ambiente agradable, muy recomendable

Tuvimos un almuerzo excelente. Nos atendieron increíblemente bien, de principio a fin. Y la comida... una deliciosa sorpresa tras otra. Quedamos maravillados con la chef Sara y su equipo. Sin duda, la experiencia vale la pena.