Street-Xo en Madrid

El ambiente y los platos son extraordinarios; todo es sumamente creativo y está muy bien elaborado. El atento personal se esmera en explicar cada detalle y garantizar una experiencia inmejorable.

Una experiencia distinta, nos gustó bastante el ambiente.

Una auténtica pasada , fui hace un mes aproximadamente a Rabioxo y aunque se supone que es mejor nivel que Streetxo y mucho más caro no tiene nada que ver con, disfrute mucho más de la comida y del ambiente en streetxo.

Muy recomendable, desde el ambiente, sle show, las sorpresa de sabores, el local, todo. No iba con grandes esperanzas y me sorprendió gratamente, volveremos.

Estuve tomando un cóctel y la verdad que espectacular la presentación y originalidad aparte de que estaba rico rico merece la pena visitarlo, si estás por Serrano de compras para a darte un capricho

Prepárate para una explosión de sensaciones. Entrar en StreetXO es como adentrarse en otra dimensión. Es como sumergirse en una película de Baz Luhrmann: frenética, vibrante y espectacular; solo que esta vez, el legendario chef David Muñoz está al mando. En cuanto cruces el umbral, tus sentidos se verán inundados por la música atronadora y las impactantes imágenes. Mientras esperas mesa, quizás tengas la oportunidad de probar su cóctel insignia, el ❤️ BLOOD XO, servido con gran dramatismo en una copa con forma de corazón. Pero esto es solo el preludio del espectáculo que te espera. Enseguida, estarás sentado en la barra roja que rodea la cocina abierta, lo que permite a cada comensal observar de cerca a los chefs en plena acción. Aquí, cada plato es una historia contada a través del sabor, la textura y la forma, y ​​ver cómo se prepara la comida en tu mesa es un auténtico espectáculo culinario. Desde los DUMPLING PEKINÉS hasta la LASAÑA COREANA, cada plato se siente como una obra de arte surrealista nacida de la imaginación sin límites de su creador, demostrando el genio de Muñoz para fusionar influencias de la comida callejera global con una técnica digna de un restaurante Michelin. Pero hay una advertencia: el mundo de David Muñoz no susurra, ruge. La alquimia de sabores intensos, la implacable banda sonora electrónica y la decoración kitsch hiperestilizada podrían llevar a algunos comensales al borde de la sobrecarga sensorial. Sin embargo, en este mundo, Muñoz es un dios y el exceso es la esencia de su universo. Cada bocado, cada sonido y cada color es una declaración divina de su visión, convergiendo en una experiencia gastronómica cargada de adrenalina. StreetXO funciona menos como un restaurante y más como un parque temático. Si te atreves a vivir la experiencia completa, prepárate para una descarga de adrenalina inolvidable. Pero si vienes únicamente por la gastronomía, tendrás que aceptar las condiciones de entrada. Para quienes estén dispuestos a sumergirse en el caos, la recompensa es una comida extraordinaria.

Comida muy rica, pero el ambiente no me gustó para nada. No se puede ni siquiera hablar con la persona que está contigo, mucho ruido, no sólo por la cocina, pero por las canciones en alto volumen.

La comida muy buena, diferente pero todo exquisito. Un buen lugar para comer cosas diferentes y mezclas inimaginables. El lugar es moderno y tienen la música muy alta pero es parte de la experiencia.

A la altura de las expectativas. Platos innovadores, sabores increibles y una presentación muy buena. El precio realmente está bien para la experiencia que supone. A nivel de sabores, de verdad que merece la pena poder disfrutar de su carta.

Nos gustó todo de este sitio, el ambiente en barra, la energía de los que trabajan allí, todo un espectáculo. La comida era maravillosa y abundante. Sabores diferentes. El total fueron 184 € para 2 personas. Para una experiencia lo vale.