Rocacho, España en Madrid

Buena comida. ¡Recomiendo totalmente los tacos y la carne que comí!

Entramos con espectativas de que el arroz era bueno, pero lo que pasó es que era EXPECTACULAR, pocos arroces probé tan buenos , las croquetas buenas y la ensaladilla buenísima, muy buen trato y muy profesional todo el servicio , repetimos seguro , un acierto

Un fijo al lado del Bernabé. Arroces,pescado, carnes sabrosas y una bodega amplia.

Hemos estado comiendo hoy y me ha parecido un restaurante de 10. Empezando por el personal, que se le ve súper profesional. Y de la comida, qué decir, destacar la carne que hemos pedido con 90 días de maduración, súper buena, y los postres, también increíbles.

Fui invitada por un familiar a este restaurante, y menos mal, porque la verdad me parece que para el precio que tiene no merece la pena visitarlo. Yo pedí merluza, pero probé otros platos del resto de invitados, y la calidad no me parece acorde con lo que pagas. No destaco nada especial de todos los platos . Y del local, desde luego la zona donde hemos estado, que es la alta, tiene unas ventanas " poligoneras," que no lo hacen nada acogedor. Ni repetiré ni recomendaré. En definitiva, local sobrevalorado.

Fuimos 5 personas a cenar y nos gusto mucho la cena. Pedimos varios entrantes y luego solomillo de buey y chuleta de vaca madurada 40 días. Este restaurante destaca por tener carne de la famosa finca “El capricho” y está muy buena, no se si la mejor, pero está muy buena. La atención por parte de los camareros fue muy buena. No pongo 5 estrellas en el ambiente ya que nos pusieron en terraza cubierta y pasamos frío, no lo tenían bien aclimatado.

Estuvimos aquí comiendo mi novia y yo el domingo 23 de marzo de 2025 previa reserva a las 13:00. Restaurante tradicional madrileño con clase y solera, como es habitual en Chamartín y más en particular con los restaurantes cercanos al Bernabéu. Camareros educados y bien vestidos con camisa y chaqueta (aunque alguno llevaba zapatillas blancas, una moda moderna que no terminó de comprender) y clientes "cayetanos", que es como se llama hoy en día a los "pijos" (no lo digo como crítica, eh, qué conste, sino como algo descriptivo). Pedimos de entrante media ración de croquetas y dos Rocachos, que son unos buñuelos de bacalao con un rebozado de color negro. Las croquetas no estaban mal, pero las he comido mucho mejor en otros sitios. En cuanto a los rocachos, increíbles, muy buenos, deberíamos haber pedido más. De plato principal pedimos arroz con carabineros para dos personas. Lo traen en una paella grande y con una capa delgada de arroz, al estilo de cómo lo hacen en Alicante. Después de mostrártelo, lo emplatan y te lo sirven, bien repartido. Un arroz riquísimo, con una textura crujiente y un socarrat maravilloso. Mención aparte a los carabineros, como si los comieras en Galicia (sé que queda muy "cuñado" decir que el mejor marisco se come en Madrid, pero en determinados sitios de Madrid sí se come mejor marisco que el que puedes encontrar en muchos sitios de costa destinados al robo al turista). En resumen. Un 10. Para regresar.

Han bajado un poquito la calidad y mantenido el precio. El bao de ternera chiclosa, la lubina salvaje me pareció de piscifactoria, poco sabor, solo se salvaron las almejas.

Carta amplia y con buena calidad. Personal muy amable y servicial. En especial el jefe de sala. Son muy rápidos en la cocina. Para volver.

Un restaurante en el que pagas 80/90 euros por persona debe esmerarse mucho más. Lo primero, no puedes poner una mesa pegada a la escalera por donde, continuamente, están subiendo y bajando camareros y clientes. Por lo que respecta a la comida, ésta tampoco hizo verdadero honor al importe de la factura. Y en cuanto al servicio, claramente lento (aunque pudo ser problema de la cocina) y, la verdad, bastante bisoño. En definitiva, un precio excesivo para el nivel del restaurante. Por mi parte, y con el máximo respeto, no repetiré.