Robata - Jorge Juan en Madrid

Precioso restaurante, cada planta es un mundo y cada cual más elegante. Tuvimos reservada una mesa en la azotea y fue espectacular. Destacar el trato y la amabilidad según entramos, además de la presentación de cada plato junto al sabor exquisito de todos ellos. Volveremos sin dudarlo!!!!! Pd.: Gracias a Beca por todo.

Uno de los mejores restaurantes japoneses de Madrid. Su terraza de arriba está genial. La comida muy buena y el servicio estupendo

Sitio precioso, con.mucho encanto. Cenamos en la terraza de arriba y noa decidimos por el menú Robata. Gratamente sorprendida. Rico, servido a buen ritmo.

Todo buenísimo. Servicio muy agradable. Producto 10 y muy buena decoración.

Espectacular menú degustación de 7 pases, más postre y café por 80€. Todo delicioso y de calidad, producto inmejorable. A destacar el toro soasado. Nuestro camarero, Gabriel, super atento y amable. Todo de 10.

Un 10 al paladar! El sushi es excelente pero los platos de pescado robata( al carbón), cosa que es especializado el restaurante, son un placer. Bien ejecutados, platos con sencillez y con sabor que te quita el hipo. Volveremos seguro

La comida excelente y el servicio (nos atendió Iván) también. Repetiremos!!

Los nigiris y el uramaki anticuchera están muy buenos.Muy majos los camareros que nos atendieron, Johnny e Iván.

Todo muy rico y Jonny muy buena atención!

Fui con mi pareja a cenar. El sitio es pequeño pero decorado con muy buen gusto. El sushi está muy bueno, con propuestas interesantes, aunque es verdad que no hubo ningún plato super especial con el que dijéramos "wow". El precio bastante elevado, aunque en general en la media de los restaurantes de sushi de este tipo ahora en Madrid. Cosas por las que les pongo 3 estrellas: - el servicio es atento, pero no demasiado agradable - te cobran por una botella de agua casi 3 euros cuando no es agua mineral, si no agua de grifo filtrada... - teníamos una pareja al lado a la que le ofrecieron un digestivo al acabar,invitado por la casa. A nosotros no, literalmente 5 minutos después. Me pareció tremendo detalle de mal gusto, sobre todo después del pastizal que nos gastamos en la cena.