Restaurante Palacio Carvajal Girón en Plasencia

Mi Experiencia ha sido de 10 , la habitación está muy bien , limpia , amplia y con todo detalle para nuestro perrito con sus premios y sus comederos y su cama. El sitio es muy tranquilo y muy bonito y las instalaciones también están muy bien El personal de allí nos han tratado fenomenal. Recomendable 100%

Hemos estado tomando algo y cenando en el hotel y la verdad que es súper bonito con su estilo rústico elegante, el personal de recepción súper amable. La comida del restaurante muy rico, aunque habido platos mejores que otros, eso sí el servicio del restaurante deben de mejorar un mundo, la chica súper lenta y poco simpática.

Fui al restaurante y me sorprendió muy gratamente la panceta que pusieron y el postre, todo un deleite. Ubicación perfecta en una zona con encanto que te transporta a otra época. Seguro que repito…

Destacar la profesionalidad de sus empleados.

El hotel es muy bonito pero nuestra habitación era muy incómoda y había un olor general a humedad.

Siempre hemos estado bien en ese hotel. Ningún defecto. Bien situado. Servicios y atención exquisitos fantástico

Sitio histórico, remodelado, donde han conseguido tener una cartera de clientes muy satisfechos por los profesionales que atienden en su día a día. ¡Seguid así! RECOMENDABLE.

Espectacular entorno e instalaciones y habitación. Trato muy bueno, desayuno variado y en cantidad. En especial agradecer a Inmaculada el trato. Muchas gracias por todo

El pasado mes de julio tuvimos el placer de disfrutar de una cena en el Hotel Carvajal Girón en una sala habilitada para unas 40 personas. El entorno fue elegante, cómodo y perfectamente organizado para el evento, lo que ya anticipaba una velada especial. La propuesta gastronómica fue todo un acierto: un menú equilibrado, sabroso y muy bien presentado, con platos elaborados con mimo y con una calidad de producto que se notaba en cada bocado. Pero lo que realmente marcó la diferencia fue la atención personalizada desde el primer momento. El trato con la dirección y la recepción fue ejemplar. Se mostraron en todo momento atentos y comprometidos con las necesidades del grupo, especialmente a la hora de ajustar el menú para personas con intolerancias, alergias o necesidades específicas como el caso de los celíacos. Se notó una implicación real por ofrecer una experiencia inclusiva y sin sobresaltos para nadie, lo cual es muy de agradecer. El servicio durante la cena fue igualmente impecable: cercano, amable y muy profesional, haciendo que todo fluyera con naturalidad. En resumen, una experiencia gastronómica sobresaliente, tanto por la calidad de la cocina como por el nivel humano y profesional del equipo. Sin duda, un lugar para recomendar y al que volver.

Excelente experiencia aquí, encantador entorno en este lugar histórico. El restaurante se encuentra en un edificio que tiene mucha historia IT. El menú aprovecha las cualidades y tradiciones locales de la comida con un estándar muy alto