Restaurante Museo de Productos de Castilla-La Mancha en Toledo

Nos ha gustado mucho, un poco excesivo el precio del torrezno pero la comida muy buena, los camareros muy amables

El cocido que me he comido hoy aquí rozaba la perfección y luego un postre casero todo por el precio del menú. Espectacular

Todo estuvo espectacular. La comida salió caliente, bien servida y en su punto, algo que me sorprendió siendo un grupo tan grande. Los platos tenían buena cantidad y estaban muy buenos. Yo probé el pisto, que estaba increíble, y el jamón asado, que me gustó muchísimo también. De postre pedí la tarta de queso y me pareció un auténtico espectáculo: creo que se ha convertido en mi favorita y ya estoy deseando volver a Toledo solo para repetirla. En resumen, un muy buen sitio, con comida riquísima y una atención espectacular.

Buena comida, no es caro (para como está el panorama) y excelente servicio

Tiene una buena relación calidad precio

Muy buena comida espectacular ,vinimos justo de tiempo y aun asin nos atendieron os lo recomiendo mucho

Atención espléndida muy atentos pero sin agobios Comida muy buena. Hemos ido de menú a algo más de 16€. Volveremos seguro.

El lugar es muy bueno. Ofrecen un menú por 25 euros que incluye un plato de entrada, un plato fuerte, postre y copa de vino. Ahí comenzó mi buena experiencia. El mesero nos preguntó quienes de los comensales queríamos vino y quienes agua. El grupo se dividió en la opciones y el mesero, rápidamente trajo una botella grande de agua y una botella de vino que puso ambas sobre la mesa. Primer signo positivo, no es un lugar que opta por la miseria, sino por la atención a sus clientes. Luego de entre las opciones del menú, opté por un arroz con alcachofas, bueno, el sabor casero del arroz, con trocitos de carne y un poco de caldo me traslado a un guiso de la abuela. Delicioso. Después vino el plato fuerte, pedí cordero al horno, pieza abundante pero justa, acompañada de una papas con romero que me encantó. Y el postre, un pastel de queso, ¿O pay?🤔 Delicioso! Cremoso y con un toque discreto pero firme de vino. Lo disfruté. El sitio es muy agradable, bien decorado y acogedor. El personal atento, relajado y auténtico; realmente nos hicieron sentir cómodos. Sin duda este un sitio que se queda como obligado para la próxima visita a Toledo.

Comida buenísima. Los platos son originales y abundantes. El menú diario tiene varias opciones y un precio muy razonable.

Muy recomendable. Comimos de maravilla todo el grupo. Tienen un menú de 16€ casero, con mucha variedad y buena calidad. Está situado al lado del Monasterio de San Juan de los Reyes. Los camareros ágiles y amables.