Restaurante MasterChef en Madrid

Bonito local, buen servicio aunque calidad precio mejorable, para hacer el menú degustación obligatorio pedirlo toda la mesa.

Buen restaurante con un servicio de alta calidad Hemos tomado el menú degustacion que aunque algo escaso presenta platos muy bien cocinados verdaderamente ricos No me gustan demasiado los restaurantes con música de fondo pues impide poder tener una conversación fluida y aquí la música para mi gusto estaba un poco alta En general es un sitio agradable que recomiendo visitar

Llegamos y todas las mesas estaban vacías y aún así nos colocaron en una mesa en una pequeña terraza con sillas que me recordaron a una cafetería barata. Nos ofrecieron una mesa mejor después de quejarnos, pero es un misterio por qué no nos ofrecieron la mejor mesa disponible en primer lugar. La comida era buena, pero lejos de ser espectacular, y las porciones eran tan pequeñas que apenas podían llenar a un niño pequeño. Creo que flotan en el nombre y ofrecen comida cara que yo mismo podría haber preparado igual de buena. Hemos hecho eso, así es como nos sentimos.

Gran experiencia y servicio. Comida deliciosa, con raciones y una sensación de saciedad mayor a la esperada, en contra del tópico de comida presumida. Recomiendo el cochinillo de Pepe y la tarta de queso.

Cenamos la noche del 21 de diciembre dos adultos y una niña de 14 años y consumimos el menú degustación que consta de 6 partes. Los platos me parecieron muy buenos, cada uno de ellos una pequeña obra de arte, tanto por sabor y estética. El servicio en sala intachable, personal amable y siempre atentos a la finalización de cada plato para servir el siguiente. El ambiente del local, para un seguidor del programa de TV, una fantasía. Destacar la gran idea de que un concursante del programa (Jeremi MC11) confraternice con los comensales, contando su experiencia en el programa mientras sirven y presenta los distintos platos. Si bien hubo una cuestión que no nos gustó. Nuestra hija de 14 años no está habituada a sabores intensos y suele rechazar aquellos a los que no está acostumbrada, por ello, al tomar asiento le pedimos a la persona que nos cogió la comanda que queríamos un menú júnior, el cual se ajustaría más a sus circunstancias. Nos respondió con un comentario que pretendía ser gracioso, pero a nosotros nos pareció desafortunado, alegando que no veía a ningún menor de 12 años en la mesa. El resultado, solo disfrutó de 2 platos, el canelón y el postre, el resto fueron retirados prácticamente intactos. La verdad, da pena pagar 60€ para salir del restaurante y tener que darle algo más para que termine de cenar. Creo que deberían ser más flexibles con la edad del menú júnior.

Buen sitio comida buena y sobre todo el personal tremendamente atento a todo nos ha encantado. Sin duda si te gusta el programa has de ir a verlo y degustar las viandas.

La comida está buena, escasa pero buena..Los camareros súper antipáticos, te recogen las cosas con prisa..pedí un vaso de agua y el vaso olía fatal.

Nos hacía mucha ilusión comer aquí. Nos gustó mucho hacernos fotos con la m de Masterchef y el reloj del programa. Nos encantó la hamburguesa en la caja misteriosa. En cuanto a la comida estaba buena sin ser excepcional. Y nos habría gustado más platos icónicos del programa. Lo que más me animó a ir con mis hijos fue la existencia de un menú infantil que no sé basa en macarrones y nuggets. En general muy buena experiencia.

El local es muy bonito. En la recepción estaba Jota, antiguo concursante, muy simpático y atento. Los platos estupendos, a destacar los baos de gambon, los tacos, el solomillo a la mostaza, la presa ibérica y la lubina. El servicio es atento y profesional. El único fallo es que no hay cocktails, ni preparan un simple café irlandés, y las opciones para tomar un combinado en la sobremesa son mínimas (por ejemplo, solo tenían una marca de ron).

Una experiencia muy buena. Somos seguidores de todas las ediciones donde no podía faltar la visita al restaurante ya que hemos venido a la ciudad. Cogimos mesa con antelación dentro; la decoración muy al detalle, con cuadros de ediciones anteriores y con la presencia de Jotha (una persona de 10). Los platos de la carta muy conseguidos y riquísimos empezando por el detalle de bienvenida hasta el postre. La atención prestada del metré como de los camareros ha sido muy profesional. Sin duda en la próxima visita a la capital reservaremos.