Qorte en Madrid

Restaurante de cocina mediterránea donde destaca la calidad del producto y los arroces

Buenisimo. Las Alcachofas muy recomendadas

Finalmente un buen arroz en Madrid! :)

Nuevo restaurante en Madrid . La comida estaba muy rica . El arroz. Estupendo . Bien los entrantes y normal el postre quizás su”punto más débil” están en rodaje . Suerte.

Recomendado al 100%. Hemos comido hoy y la verdad que tanto el servicio como la comida ha sido espectacular. Gracias.

Restaurante mediterráneo con variedad de entrantes fríos y calientes. Con algunos fuera de carta según temporada. Esto es una muestra más de que el producto es muy protagonista. Espectacular la langosta con garbanzos. Sabroso, contundente y muy otoñal. Ración generosa. Sólo se puede pedir para dos o más, como los arroces o la fideuá (que hasta la próxima visita quedan pendientes). Carta de vinos muy amplia y con referencias interesantes. El local es un poco ruidoso pero cuenta con dos reservados para 12 personas muy “jugones” para eventos y comidas de trabajo. El cambio del espacio (si conocías el antigua o Floren) es espectacular. La sala es preciosa. El equipo muy simpático y cálido. Habrá que seguir probando la carta para ver si, como parece, se convertirá en una referencia en el barrio.

Comida y trato excelente de 10, volveremos.

Este es un gran restaurante que sirve comida valenciana. El restaurante es nuevo y bonito. La paella estaba excelente. La ración era generosa. Sin duda, este es uno de los mejores restaurantes de paella de Madrid.

Visitamos este restaurante atraídos por su propuesta de cocina abierta, y la experiencia fue muy positiva. Desde la entrada se puede ver cómo trabajan a la vista del cliente, cocinando con brasas y producto de mercado en el momento, algo que marca la diferencia en sabor y frescura. Es verdad que la gran cristalera que da a la calle hace que desde fuera se pueda ver a los comensales, y da la sensación de estar comiendo casi en medio de una plaza. Aun así, cuentan con varios salones más íntimos que ofrecen más privacidad. La carta es básica y sencilla, centrada en producto mediterráneo: carnes, pescados, arroces y postres. Todo elaborado con mucho mimo y esmero. El arroz nos gustó especialmente, abundante y muy sabroso (incluso sobró, algo poco habitual). El steak tartar en brioche también fue un acierto: sabroso, equilibrado y muy bien presentado. El personal es muy amable y atento, algo que otros clientes también destacan, mencionando un servicio profesional y cercano. Los precios son altos, pero acordes a la zona, al servicio y a la calidad del producto. La cocina a la brasa y el uso de ingredientes frescos justifican el ticket final. Muchas opiniones coinciden en resaltar la calidad del producto y el buen hacer del equipo de sala. Como único punto a mejorar, algunos comensales comentan que si se cena muy tarde el servicio puede relajarse un poco en la parte final, especialmente al pedir los postres. En resumen: un muy buen restaurante para disfrutar de cocina mediterránea de calidad, preparada a la vista y con brasas. Ideal tanto para una ocasión especial como para una comida o cena tranquila. Buen producto, buen servicio y una experiencia que merece la pena.

Todo increíble. Literalmente, una velada perfecta. Los camareros fueron increíbles, especialmente el sumiller, que nos dio unas recomendaciones increíbles. La comida fue un 10/10 y el restaurante es simplemente precioso. Los precios son muy razonables; si buscas calidad, tienes que pagar un poco más, y 200 € para dos personas con una botella de vino (50 €), tres entrantes, dos platos principales de carne y un postre está más que bien. ¡Un lugar genial!