Bar Restaurante Andorra en Barcelona

Obtener el pato es inmejorable, pero todo lo que pedimos fue genial. Personal amable y agradable. Pudimos ver a la chef desde nuestra mesa y quedamos muy impresionados con ella. ¡Ojalá hubiera podido pedir mucho más en el menú, así que volveré!

No debería poner esta reseña porque es el único lugar de una Barcelona petada de turistas que te permite sentarte tranquilo, en medio de un lugar sin aglomeraciones, y disfrutar de buena comida al aire libre. Miedo me da, que fijo se hace famoso y no vuelvo a poder ir en la vida...pero es que: lugar genial, servicio de 10 y comida de 100 ¿Qué comí? Mojama, si no te gusta el pescado en salazón te lo pierdes porque está buenísima. Patatas bravas, con un estilo muy peculiar, añadiendo hierbas provenzales y crujientitas, y el picante justo Milanesa🫠 Y postre de chocolate 3 texturas, que si hubieran sido 20 también me las hubiera comido. Lo dicho: ojalá que esto no se vuelva viral, que no veas las ***** colas en Barcelona, pero por favor que les vaya bien porque quiero comer allí muchas veces

Estábamos buscando un lugar donde cenar por la zona. Tenia varios guardado en Tripadvisor asi que fuimos acercándonos a cada uno, mirando las cartas colgadas y si nos llamaban preguntábamos si había sitio. Tras varios intentos sin éxito llegamos al Bar Andorra que no tenia la carta expuesta y por la iluminación (bastante oscura) pensábamos que era mas de tomar copas que para cenar, pero vimos que había cocina asi que preguntamos. Solo les quedaba una mesa con asientos en el pasillo juntos a la cocina, asi que decidimos probar. Se supone que hay comedor interior y entendemos estaba lleno. Y para la terraza por lo que oímos mas tarde había cola. La carta de comida me pareció limitada. Pedimos la burrata que venia con una base de rúcula, tomates Cherry a la brasa, almendras tostadas y salsa pesto. Muy rica y sabrosa. Y como platos principales el magret de pato con reducción de vino dulce, laminas de manzana y puré de boniato y zanahoria, muy bueno y en su punto. Y la entraña de potro tagliata que lo pedimos al punto y estaba bien hecho pero templado casi frio. Valoramos pedir que lo calentaran pero perdería el punto de la carne, asi que nos lo quedamos como estaba. La verdad que no nos gustó mucho a ninguno. Las patatas rusticas que lo acompañaban estaban muy buenas, eso si. Y los pimientos del padrón bien hechos. En cuanto a bebidas a parte de cerveza pedí una michelada y estaba bien hecha. Salimos a 30€ por cabeza. Algo elevado sobretodo por el plato de entraña que no nos gustó y era lo mas caro. Es un lugar que si estas por la zona puedes entrar a tomar algo y/o picar, pero no iría intencionadamente para cenar aqui.

¡Bistro ecléctico con un ambiente relajado y algunos bocados sabrosos! Cada plato que compré fue sabroso y el personal es amable. Tienen platos del día, lo cual recomiendo (¡al menos el día que estuve allí estaban buenos!). Definitivamente es más un lugar local que turístico. Tienen asientos en el interior y al aire libre, wifi y 🏳️‍🌈 amigables.

A mí me ha gustado mucho. He hecho un menú y la relación calidad precio ha sido muy buena. Además, todo en catalán, la carta, los camareros, perfecto.

Lugar muy agradable, vinos naturales y no naturales, ambiente/decoración/música muy interesante.

Un lugar donde la caña si la pides diciendo que eres local puede estar a 1.30 a 1.80 euros. Otros días a 3 euros.

Un espai curiós a nivell de decoració, amb una bona cuina, preu raonable, però ens sorprès que no tenen menú ni els dijous ni divendres. Una llàstima

Uno de los mejores bares del Borne, con ambientazo, musicón, decoración vintage y comida exquisita, (y vinos naturales). Me lo estaba pasando tan bien que me olvidé de sacar más fotos de la comida. ¡Sin duda, uno de mis sitios preferidos desde que vivo en Barcelona!

Ha mantingut l'aspecte històric del bar, per mi molt acollidor. El menjar està molt bo i el personal molt amable. Ara tenen una terrassa al carrer.