10/06/2025: Fuimos a cenar 3 personas. El restaurante es muy bonito, aunque un poco bullicioso. Por suerte nos pusieron en una mesa del pasillo que se está más tranquilo. El servicio muy simpático y te asesoran bien, aunque se olvidaron las bebidas y nos llegó la comida y no teníamos nada que beber, pero es un fallo menor que rápidamente solventaron. La comida es exquisita y con propuestas muy originales. Pedimos 3 sardinas, 1 tarama, que es como una mouse de pescado especiado con pimentón de la vera que estaba muy rico y suave, un tartar de ternera que estaba muy bien condimentado y es diferente al tratar clásico, el flatbread con stracciatela y habitas y guisantes tiernos que estaba muy bueno, la berenjena con miso y salsa de mantequilla tostada, sin duda fue nuestro preferido, ESPECTACULAR! y acabamos los platos salados con el tataki de atún. De postre estábamos llenos, con lo que compartimos su mousse de chocolate con pimienta, sal y aceite muy logrado. De beber tomamos 3 cervezas doble, el vino tinto Kpi y pedimos un extra de su fantástico pan recién horneado. Todo una delicia! Y la cuenta fueron 169€, 53€ por persona. Lo recomiendo mucho!
05/06/2025: Fuimos de celebración con un grupo de 5 personas y fue perfecto para compartir una gran parte de la carta. Cada plato uno tras otro fue elevándose aún más y quedamos sorprendidos del balance de los sabores y la harmonía de cada plato.
Empezamos pidiendo unas sardinas (estilo gildas), el pez limón y la estrella de estos primeros tres, la tarama de maruca. Luego continuamos con las berenjenas y el tartar de ternera y definitivamente se convirtieron en unos de los platos favoritos de la noche para todos. El tartare estaba bien balanceado entre dulce, salado, acido y picante y el toque de cacahuete lo hizo aún más memorable. Los últimos platos fuertes que pedimos fueron las mollejas, la sepia, el pichón y el puré de alubias. Por favor tienen que probar las mollejas y la sepia, son dos platos que nos transformaron.
La experiencia definitivamente fue excelente! El servicio empezó un poco lento pero luego estuvieron muy amables y atentos. Un punto para mejorar es la selección de postres que el mousse de chocolate si nos sorprendió con su aceite de oliva y sal pero el bizcocho de avellanas si fue un punto bajo de la noche, para terminar nos decepcionó bastante porque no tenía mucho sabor ni textura. Pero en general no nos opacó la noche y disfrutamos de cada momento.