Asador de Aranda en Madrid

Servicio muy bueno y rápido. Cordero un poco seco a mi gusto en el menú y ensalada poco elaborada. Entrecot muy bien.

No obstante es una cadena, logran un nivel de calidad homogéneo. El cordero y el cochinillo son excepcionales. Clásico. Se puede repetir

Alejandra y otro muchacho que nos atendió nos dieron tan buen servicio que nos dieron ganas de regresar. Muchísimas gracias de verdad!!!

Un lujazo de restaurante, el asado que nos comimos para chuparse los dedos, el vino, los postres, calidad máxima. La rapidez y trato de los camareros de 10. Repetiré seguro.

La deliciosa sucursal de Barcelona no es la misma, pero así es

Un clásico de Madrid en un entorno agradable y con comida tradicional de calidad a un precio razonable. Destacan las carnes y la atención pendiente de cada detalle.

Disfruté el cochinillo y los postres. No nos metimos en Botín y no nos arrepentimos.

Restaurante que nunca decepciona incluso pasando los años. El lechazo es verdaderamente espectacular

Situado a muy pocos metros de la Plaza del Callao, este asador cuenta con un precioso salón interior a nivel de calle y con otro en el sótano, ambos muy cómodos y frescos. Su carta no es demasiado amplia, ofreciéndonos varios entrantes, especialidades del horno de leña y guarniciones, así como un menú por 44 €, que incluye entrada de la casa, lechazo asado, ensalada, postre, café y orujo con rosquillas. Yo me decidí por un par de platos de la carta, concretamente gazpacho y medio cuarto de lechazo asado; con una cerveza y un café con leche, más un chupito y unas rosquillas cortesía de la casa, la cuenta sumó 43,50 €. El gazpacho, muy bueno, pero me trajeron la guarnición (tomate, pimiento y pepino) cuando ya casi lo había terminado, y en cuanto al lechazo, muy buen aspecto, pero absolutamente soso, ni un gramo de sal, no sé si es que tienen la costumbre de ponerlo así o es que se les olvidó sazonarlo, pero el caso es que no sabía absolutamente a nada. No me gusta dar puntuaciones bajas, pero en este caso, creo que los dos detalles comentados la justifican, y siendo muy muy generoso lo voy a calificar como normal, pero espero que para otra ocasión tengan algo más de cuidado.

Fomos a esse restaurante para comer carneiro. O restaurante tem uma decoração mais tradicional, os garçons são eficientes, mas não mega simpáticos. O carneiro estava super macio, uma delícia!