28/01/2025: Lugar estupendo con una carta muy variada, el trato agradable y todo muy rico.
Recomiendo lo que tomamos, alcachofa sobre rabo de toro y la hamburguesa, riquísimo todo.
Íbamos sin reserva y miraron bastante por atendernos y darnos una mesa.
Conocía la terraza pero el interior también merece ka pena
23/01/2025: Fuimos a comer un domingo en familia con reserva a las 14:00h y nada más llegar, lo primero que nos dice la chica que nos lleva a la mesa es que la tenemos que dejar a las 15:15h. Primera mentira, porque en el correo de confirmación nos informan que la mesa la tenemos disponible hasta las 15:30h. Nos tomaron nota rápido pero sin prisas, pedimos una botella de vino y otra sorpresa con la carta, precios altísimos. Si entiendes de vinos sabes en cuanto están aprox y el margen que se llevan es bastante alto. Como habíamos ido a disfrutar, pues pedimos una botella de un vino que nos gusta y ya está, se paga y punto. De comer pedimos todo para compartir. Brioche de rabo de toro (exquisito), croquetas de jamón (nos las podíamos haber ahorrado, malas), tempera de langostinos (muy buena), chipirones de anzuelo (buenísimos) y lomo bajo de vaca con patatas fritas (bueno). De postre pedimos torrija con vainilla de bourbon porque ya no podíamos más. La comida estaba muy buena, los precios altos pero supongo que entre la calidad y el sitio donde está el restaurante ayudan a que los pongan elevados. El local es muy bonito, bien decorado y con detalles que te hacen estar muy cómodo. Sin embargo, la experiencia no pudo ser completa por el trato del personal. Además de la advertencia nada más llegar, no fueron agradables en ningún momento, parecía que molestábamos. Trajeron los platos y cubiertos de mala gana, cuando llegaron las croquetas las sirvieron casi tirándolas al plato, una se cayó en otro plato y al recogerla literalmente la espachurraron y fue a mi plato machacada. Nos trajeron todo junto, sabiendo que no podíamos comer tranquilos los chipirones y la carne y que se enfriaría, supongo que se acercaba la hora de echarnos y tenían prisa. Les dijimos que se llevasen la carne hasta terminar los chipirones y que la trajesen de nuevo caliente. Las patatas nos las dejaron ahí, al final las comimos frías con la carne pero bueno. A todo esto, nos pasamos las 15;15h y la carne todavía no estaba de vuelta, pero nadie nos dijo os tenéis que ir. Al final acabamos de comer a las 15:50h, pagamos y nos fuimos y no ocurrió nada. No había una reserva después de la nuestra, nadie esperando, con lo que no entiendo las ganas de echarnos. En resumen: sitio bonito, comida buena pero precios altos, y trato muy muy mejorable. No creo que volvamos, y es una pena.