Taberna Plaza Nueva en Bilbao

Trato impecable, la comida riquísima y para los precios que hay hoy en día muy aceptable calidad precio. Si vuelvo a Bilbao volveré seguro!

Personal muy amable, comida muy buena y asequible. ¡Qué grata sorpresa teniendo en cuenta la ubicación! ¡Lo recomiendo totalmente!

La atención de Sandra ha sido fantástica. Los pintxos muy ricos y las rabas riquísimas. Repetiría sin dudarlo.

Local pequeñito pero muy bien situado. Estaban todos los locales de la plaza a tope y aquí tenía mesa libre….. al principio sospechamos del “porque” no estaba a tope …. Pero teníamos hambre y los pinchos tenían muy buen aspecto. Al final los pinchos correctos, la atención adecuada y nos llevamos buena experiencia. Tienen ofertas de pinchos y plato del día. Al ser el local tan pequeño le falla un poco la limpieza del baño 🤷‍♂️🤷‍♂️

Otro sitio muy bueno de pinchos y también en la Plaza Nueva.

No es el mejor de Bilbao, pero se come muy bien, son muy amables y serviciales y tienen un precio inmejorable. Volveré.

Gildas ricas y personal muy agradable. Repetiría sin duda.

Veronica es muy guapa,amable y divertida.Salud de Chipre 🍻

La atención es maravillosa considerando el volumen de trabajo que hay en esta plaza. Los pimientos verdes están muy buenos

Es interesante saber como siempre ,hacer turismo viajar y conocer más importante que hacer , donde aparcar el cuerpo para comer.Preguntando se llega a Roma, y por lo tanto la mejor versión, siempre está en las manos de los lugareños.Bilbao ,ciudad cosmopolita bordeada por el río Urumea un tanto bastante sucio lo vimos este viaje ,reúne las facultades gastronómicas imprescindibles en una localidad del norte de España.Recalamos después de la visita al teatro Arriaga cuyos ancestros son relacionados con los de mi esposa de igual apellido , la Catedral de Santiago gótica e impresionante el andar por la orilla del río en una mañana en Semana Santa sin paraguas afortunadamente. Dicho esto cuando el estómago avisa nos desplazamos hacia la plaza Nueva que es antigua adoquinada y como tal arqueada y bien pronunciada centro de reunión de bilbaínos turistas de toda índole agradecidos a los manjares propios de esa maravillosa tierra. Entramos en esta taberna ancestral que data en origen del siglo XIX, para saborear en esa barra inmensa cubierta de pintxos lo mejor de la huerta a gusto del consumidor.Mi mujer y yo dimos cuenta del txacolí vino espumoso vasco delicioso y fresco y por supuesto NO PONEN NADA PARA ACOMPAÑAR, COSA FEA ME PARECE ,en Madrid no falta, pedimos glorioso pinchos de pimientos del piquillo rellenos gildas (anchoa, aceituna, pepinillo) exquisito pincho de morcilla vizcaína así como otros tantos deliciosos variados a la vista del cliente.Servicio atento amable y rápido calidad precio dentro de lo normal entre 2,50€ de media el pintxo en función del tamaño que señala el palillo que lo compone.Increible cocina vasca bien servida.Muy recomendable de la más antiguas taberna bilbaína donde se pierde el sentido mirando la barra a gusto de todos.