Taberna Erretegia en San Sebastián

Un sitio muy agradable y las camareras son muy amables.

Muy bueno todo, en especial la chuleta, las croquetas y la ensalada

Un asador ubicado en lo alto de Igueldo más allá del pueblo camino de Orio por una preciosa pista que te lleva hasta allí . Comida típica de asador con unas croquetas de 8,5 y merluza rebozada de 9,5 por nor exagerado. Buenas sidra, servicio excelente y precio razonable.

Merece la pena apartarse al ir a Donostia para degustar una comida espectacular

Sitio muy agradable para tomar platos caseros muy bien cocinados y a un buen precio. Hay que reservar xq suele estar lleno. La ubicación es un poco alejada.

Me falto mas variedad en la carta , los postres buenísimos, sobre todo el tiramisu

Nunca defrauda. La croquetas imprescindibles para el aperitivo con la botella de sidra. La comida siempre buena, las piparras apenas picaban, cosa que se agradece; y la merluza a la plancha estaba perfecta y de un tamaño que ya no se ve.

La comida estuvo deliciosa. Pedimos un bistec. La carne estaba súper tierna y muy sabrosa. Las guarniciones eran muy escasas, pero suficientes.

Como siempre fantástico. Comida muy buena y trato excelente. Súper recomendable.

El Asador Ekaitz es uno de esos lugares con encanto que te hacen sentir como en casa. Ofrece comida tradicional y casera, con el ambiente de un mesón de toda la vida. Su ubicación es preciosa, ideal para disfrutar de la zona, y la carta de pintxos está llena de opciones riquísimas. Además, el precio es muy bueno, ya que pudimos disfrutar de un almuerzo completo por unos 8 € cada uno. Lo que más me gusta es que no es un sitio presuntuoso, sino un lugar honesto, como los de antes, con gente cocinando una sopa con cariño y clientela de toda la vida. No hay nada que no me guste: es auténtico, bien de precio y con una comida deliciosa. ¡Muy recomendable! --- Asador Ekaitz is one of those charming places that make you feel at home. It serves traditional, homemade food in the warm atmosphere of a classic Spanish tavern. The location is beautiful, and the pintxos menu is full of delicious options. On top of that, the prices are excellent – we enjoyed a full lunch for about €8 each. What I love most is that it’s not a pretentious place – it’s an honest spot, just like the old days, with people cooking a hearty soup and long-time regular customers. There’s really nothing I didn’t like: authentic food, great prices, and a lovely setting. Highly recommended!