Taberna Del Alamillo en Alameda del Valle

Hicimos una reserva para comer por recomendación. La atención de los camareros muy buena y la comida tambien. El recibimiento, muy malo por parte de Felix( gerente y dueño) mal educado y soberbio. Un consejo Felix, un mal día lo tiene cualquiera, no lo pagues con tus clientes, sólo tienes una oportunidad de causar una primera impresión.

Hemos estado comiendo hoy en este bello pueblo de la sierra madrileña. El trato muy bueno, excelente comida y u trato muy agradable.Gracias!! Volveremos. Paloma Valle

El sitio es muy agradable. La comida muy rica. El trato muy bueno. Los primeros cantidad normal pero de calidad y el segundo carne espectacular en su punto. Pero voy a poner un tres y no un 5 aunque me da rabia, porque el sitio me gustó mucho, pero el IVA, debe venir incluido en los precios como marca la ley!! y no cobrarse a parte, con lo cual clavada segura porque no recordamos que eso se indicará en ningún sitio y solo y como debe de ser te fijas en el precio que marca al lado del producto . Y aunque se indique en la carta que no está incluido, no es legal. Ademas, nos cobraron las bebidas de la barra en esa cuenta, así que doble IVA. Porque entiendo que si te pides dos consumiciones tapeando no te dan un ticket con IVA a parte, porque ya está incluido o Debería. Una pena en ese sentido. Por lo demás espectacular y espero que modifiquen lo del IVA.

El ambiente era realmente agradable debido a la casa de estilo antiguo, la comida no estaba mal, pero nada realmente bueno ni excepcional por los precios.

Un sitio que te hace sentir como en casa. Ambiente hogareño, cálido, tranquilo con mucho encanto. Lo recomiendo de corazón en cualquier estación del año. Félix el dueño es una persona amable, servicial, te ayudará para elegir los platos y te ofrece platos fuera de carta siempre teniendo en cuenta proctos de la temporada y de la zona. He ido muchas veces y espero ir otros tantos más! ☺️

La mesa un poco incómoda por una viga

Una carne estupenda, con el punto que les pedimos y si te gusta más hecha te ponen una teja caliente que te permite afinar al punto que tú quieras, el camarero estupendo muy majo y muy atento, pedimos los tomates y les pedimos que fuesen sin centres a y con cebolla, nos lo hicieron sin ningún problema, y para terminar postre infusión y nos regalaron un chupito, sin olvidarnos del precio más que razonable.

El sitio, precioso. El camarero, simpatiquísimo. Y la comida, deliciosa. Probamos las croquetas, el pan de aceite, el cordero y la parrillada de verduras y todo para chuparse los dedos. De postre, el abanico y la tarta de queso, ambos espectaculares. Sin duda, para repetir.

Muy buena elección. Invitado por amigos, lo disfruté...

Este año hemos vuelto a repetir e igual o mejor que el año pasado. Blanca nos ha tratado fenomenal.