Som Terra Restaurant en Mataró

No nos pareció bien que cobraran el all i oli en una fideus. Por lo demás buena calidad.

¡Hemos estado muy agusto! Comer super bueno y sobre todo un 10 en la atención. 100% recomendado. ¡Muchas gracias!❤️

Comer muy bueno, hicimos 2 arroces individuales y unas croquetas caseras perfectas. De postre un tiramisu casero también muy bueno. Disfrutamos de la comida. 💯

Hoy hemos comido en el restaurante y quedamos encantados. Camarera muy amable y cercana. La comida excelente y relación calidad-precio està muy bien. Punto positivo de este restaurante es que te puedes pedir las paellas individualmente, es decir, hacen paellas para una sola persona, no hace falta que seais un mínimo de dos. Tomate, croquetas y ensaladilla rusa buenísimo y producto de calidad. Como postre recomiendo el helado de carquinyoli. Increible!!!!!!! Un 10/10. Volveremos.

Un muy buen menú. Calidad precio correcta. Trato muy amable y ambiente agradable. Todo muy limpio. Seguro que volveremos. Hicimos un miércoles diferente

El arroz negro, impresionante! Y un servicio muy bueno y atento.

Solamente he comido en una ocasión en este restaurante y ha sido haciendo menú. La comida estaba bastante buena, el postre nos sorprendió por su originalidad. El servicio no estaba especialmente atentos a nuestra mesa, pero no tardaron mucho en servir los platos y, además, cuando manifesté que la copa de vino que había pedido no era de mi agrado, me la cambiaron enseguida, mostrando con ello su buena disposición. El precio del menú era razonable y la ubicación del local es buena, casi enfrente de la playa. Disponen de un amplio interior y unas cuantas mesas en el exterior. El acceso a personas con carritos o sillas de ruedas es posible. Los cuartos de baño estaban muy limpios. Sin embargo, creo que un elemento desluce el potencial del restaurante y, desde mi humilde opinión, es la decoración y el ambiente. Se llama "Som Terra" (pensemos en la tierra, en sus colores, en su textura, en sus frutos) y el local se encuentra revestido en una gama cromática blanca y fría, con un techo del mismo color, compuesto por una cuadrícula y atravesado por un gran extractor industrial en gris. Tampoco recuerdo ninguna música, solo silencio... En conjunto, me transmitió una sensación fría, aséptica, tecnológica, muy alejada del concepto de Tierra y, esta disonancia cognitiva, me impidió disfrutar plenamente de la experiencia, motivo por el cual, de momento no volvería (sobre todo teniendo en cuenta la amplía oferta gastronómica de Mataró). Sin embargo, considerando que la cocina lo vale y que el servicio fue atento, le doy tres estrellas. Y considero que, si trabajaran en el aspecto citado, tendría un amplio potencial de mejora pues, en realidad, comer es un acto muy cinestético y sensorial.

Comida casera y exquisita. Servicio excelente.

Buenos arroces, y los hacen individuales,para una persona servicio correcto

Excelente restaurante, muy buenos productos y menús abundantes y bien elaborados. Trato muy profesional, servicio impecable. Recomendable totalmente.