Restaurante hotel Silken Amara Plaza en San Sebastián

Precioso hotel en el centro de San Sebastián.

Acogedor, atención esmerada y excelente cocina

Nos sentimos muy cómodos en este hotel. El personal fue muy amable y servicial de principio a fin. Nuestra habitación triple era espaciosa y la cama doble tenía un tamaño adecuado. Los colchones y edredones compartidos eran cómodos. Todo estaba ordenado y limpio. Con las ventanas cerradas, se respiraba tranquilidad, así que el ruido de la calle no molestaba. El aire acondicionado funcionaba a la perfección. El desayuno ofrecía una amplia selección y se reponía con frecuencia. El comedor de desayunos no estaba abarrotado y siempre era fácil encontrar una mesa libre. Hay aparcamiento disponible en el garaje de al lado, donde los huéspedes del hotel pueden aparcar por un suplemento. Desde el garaje, también hay un ascensor hasta el hotel. El restaurante del hotel siempre tenía mesas libres, incluso sin reserva, y ofrecía comida deliciosa y deliciosa.

Estuvimos hospedados un grupo de Murcia y nos trataron con mucho cariño, el hotel estaba impoluto y la comida fue excelente.El servicio fue inmejorable, un saludo a José Luis y Luz, nuestros camareros.

El centro histórico y la playa están a unos 20 minutos a pie. Sin embargo, hay un bonito paseo junto al río para llegar al pueblo. Hay un pequeño mercado a un par de manzanas y un centro comercial cerca. Usamos una suite junior, de tamaño generoso y con una zona de sofá independiente. Como en la mayoría de los hoteles de España, el aire acondicionado no enfría demasiado por la noche. La comida estaba buenísima, recién hecha. Solo disfrutamos del desayuno, los pintxos y los cócteles, pero estaban deliciosos y a un precio razonable. Un agradecimiento especial al amable personal del edificio. Sin duda, recomiendo alojarse aquí.

Recientemente tuvimos el placer de alojarnos en el Hotel Silken Amara de San Sebastián y fue una experiencia excepcional. La ubicación era perfecta, justo en el centro de todo. Sin embargo, lo que realmente distinguió a este hotel fue su excepcional personal; cada persona con la que nos atendió fue increíblemente amable y profesional, haciendo todo lo posible para que nuestra estancia fuera cómoda. Las habitaciones eran preciosas, y apreciamos especialmente el servicio especial de alquiler de bicicletas. La bicicleta estaba en perfecto estado e hizo que explorar la ciudad durante unos días fuera una auténtica delicia. Además, el personal fue de gran ayuda para resolver un problema que tuvimos, ajeno por completo al hotel, demostrando su auténtico compromiso con la satisfacción del cliente. En definitiva, el Hotel Sirimiri es un lugar fantástico y lo recomendamos encarecidamente.

Gran hotel, recomendaría alojarse aquí especialmente si puede reservar una habitación con terraza.

Muy bien ubicado. El restaurante con buen menú. Estacionamiento directo.

Celebramos una comida familiar estupenda, con un menú super elaborado, delicioso todo, en un ambiente tranquilo, agradable y nada ruidoso. Destacaría sobre todo cada uno de los platos a cual más atractivo: aperitivo, entrante, plato de pescado y de carne y postre. ¡¡Todo buenísimo!! Muy aconsejable y a un precio increíble para la calidad que tiene

Es un lugar al que me gusta venir por lo tranquilo que es, lo bien que te atienden y por ser la cafetería más cercana a la Escuela oficial de idiomas. Pero el pincho de pimiento verde , con huevo frito y cabeza de jabalí me pareció muy sabroso