Restaurante Cobo Tradición en Burgos

Como en casa!. Espacio moderno , minimalista, todo de 10, exquisito, sabores tradicionales muy bien ejecutados. Abde y Albar hicieron además que nos sintiéramos en casa, atendiendo siempre a detalles al pequeño de la mesa. Un lujo tener en Burgos alta cocina al alcance de todos Naturalidad sobre todo. Gracias.

Es la tercera vez que he ido y la comida está rica rica, al servicio le pongo 4 porque si ellos sirven el vino, deben estar más atentos para que no se quede ninguna copa vacía y tengas que reclamar que te sirvan, sino pueden que dejen la botella en la mesa

Esta noche tuvimos la oportunidad de cenar un grupo de siete en Cobo Estratos, en Burgos, y la experiencia fue simplemente memorable. Desde el primer momento, el ambiente transmitía elegancia sin pretensiones: cómodo, cálido y lo suficientemente relajado como para disfrutar de la conversación sin interrupciones ni ruidos molestos. La atención del personal fue impecable: cercana, profesional y llena de detalles, explicando cada plato y cada vino, sin perder naturalidad ni caer en la ceremonia excesiva. Comenzamos con entrantes que definieron la excelencia de la velada: el Caviar de Wagyu (cecina premium de 16 meses de curación), la Croqueta de leche fresca de vaca e ibéricos, y la Morcilla de Burgos a la brasa y frita, pimientos asados y flor de sal. Cada plato destacaba por la calidad del producto y la precisión en la preparación. Para maridar esta apertura, un vino tinto del Penedés, de la bodega Microscopi, cosecha 2022, con taninos suaves y una frescura que realzaba sin sobrecargar los sabores intensos de los entrantes. Quienes eligieron pescado disfrutaron del “cuco”, un pescado de carne firme, sabor limpio y delicadamente dulce, tratado con técnicas que preservan su jugosidad y resaltan su frescura. Se acompañó con el vino blanco Colina Triste, aromático y elegante, con notas florales y frutales que armonizaban perfectamente con la textura y delicadeza del pescado, creando un equilibrio que invitaba a disfrutar cada bocado con calma y atención. Por su parte, quienes optamos por carne acompañamos los platos con un tinto de la bodega Sarroya, El Churrillo, El Agudo, un vino de cuerpo medio, taninos amables y buena persistencia, que realzaba los sabores profundos y jugosos de las carnes sin dominar la experiencia. La combinación de platos y vinos permitió que cada momento de la cena se sintiera cuidado y pensado, con una coherencia que pocas veces se encuentra en mesas de grupo. Todo estuvo en su punto: presentación impecable, sabores precisos, texturas equilibradas y un servicio que hacía que cada detalle contara. Nuestra valoración final, un restaurante altamente recomendable, donde la calidad de la comida, la atención exquisita y la atmósfera perfectamente equilibrada crean una experiencia culinaria que invita a regresar y a recomendar sin reservas.

El restaurante más delicioso de la Ruta de Peregrinación. El chef, galardonado con una estrella Michelin, gestiona dos restaurantes independientes (uno de platos principales y otro informal), y la cocina abierta permite ver al chef en acción. La morcilla y los mejillones fritos estaban deliciosos. El pulpo se deshacía en la boca. El filete estaba a la parrilla y sazonado a la perfección... simplemente espectacular. El interior es moderno y acogedor, una rareza en España, y los ingredientes locales y los platos tradicionales se presentan con un toque moderno. Recomiendo encarecidamente esta experiencia a los coreanos que estén en la Ruta de Peregrinación o de visita en Burgos. Es necesario reservar.

Elegante y una cocina magistral. Volveré

Para ser sincero, no cumplió mis expectativas. La comida no tiene nada de especial para ser Michelin y ni siquiera tienen sumiller. El pescado estaba poco hecho en la misma zona, la paella salada y el foie gras estaba bien. Definitivamente no pensamos volver.

Buena opción para comer comida tradicional con un toque especial en Burgos. Trato excelente y decoración muy cuidada.

Recomendable 100%. Servicio, comida y sitio de diseño.

Restaurante muy bueno en el centro de burgos.

Elegimos el restaurante para un evento familiar. Quiero agradecer a todo el equipo, empezando por Lara y Marcos que nos fueron guiando en la elección y preparación del día, siguiendo por todo el personal que nos atendió y por supuesto en especial al chef Cobo que cuidó cada detalle en el menú, haciendo que cada uno de los invitados quedara encantado con la propuesta del chef y la atención de su equipo. Muchísimas gracias por vuestro trabajo y por el excelente equipo que formáis. Muchas gracias por contribuir a que fuera un día 10 que siempre recordaremos. Enhorabuena!!