Chirón en Valdemoro

Es un restaurante que pasa muy desapercibido por fuera. No es muy grande , así que mejor reservar. Tiene un menú ejecutivo cerrado ( 35 o 36 euros sin bebida), muy variado y con muchos platos.( Sales lleno). La calidad es magnífica y la presentación de los platos , hasta el estar recogiendote las migas de pan cada dos por tres y hasta como te traen la cuenta, es maravilloso. Como sugerencia, valoraría la posibilidad de ir variando ese menú o tener diferentes menús para poder repetir sin comer lo mismo

Lo recomiendo encarecidamente. El sitio está muy bien decorado, con un ambiente luminoso, espacioso y con música muy de fondo. Las elaboraciones son un espectáculo, pedimos el menú degustación y fue un acierto. El servicio está a la altura de todo lo demás, simpáticos, educados y atentos. Por todo esto os recomiendo venir y disfrutar de la experiencia.

Cuando todo tiene sentido…. Nos hemos perdido por Valdemoro para encontrarnos en Chirón. Hemos optado por un menú ejecutivo adaptado al festivo de hoy y la verdad es que la propuesta es más que interesante. Un menú de 8 pases más el postre que no te deja indiferente… Se presentan como una cocina de tradición con un toque de vanguardia y así es. Te sorprende la aceituna de Vermut, te acerca a casa la croqueta de jamón y te traslada a un chiringuito de playa el socarrat con vieira. 49€ por una cocina de estrella Michelin que merece la pena. Piérdete por Valdemoro y conoce una cocina de proximidad, cercana y con un servicio excelente.

Un restaurante con estrella Michelin, con la posibilidad de un menú para todos los bolsillos.

Muy buena cocina y servicio, y precio bastante asequible teniendo en cuenta la calidad

El restaurante Chirón es una joya gastronómica en Madrid que combina elegancia, creatividad y un servicio impecable. Nuestra experiencia fue excepcional de principio a fin. La reserva en la web es sencilla y rapidísima. Optamos por el menú de noche (50€), una opción ideal para disfrutar de alta cocina a un precio más accesible sin sacrificar la calidad ni la experiencia. La cuenta fueron 120€ el menú con vino para dos personas. Desde que cruzas la puerta, te recibe un ambiente sofisticado pero acogedor, con un equipo de sala que domina cada detalle, desde la explicación de los platos hasta la perfecta sincronización en el servicio. El menú juega con lo tradicional y lo moderno, resaltando el producto de temporada y técnicas vanguardistas. Entre los platos que más nos impresionaron estuvieron la brandada de bacalao y torreznos hechos con la piel del propio bacalao. La lubina con el curry verde y el lomo de cierva. Un dato útil es que el restaurante está situado entre calles estrechas, por lo que desde el restaurante recomiendan aparcar en un parking público en la calle colegio 12. También puedes intentar aparcar antes de entrar en las callejuelas a 5 min andando. En definitiva, Chirón no es solo un restaurante, es una experiencia sensorial que eleva la gastronomía madrileña. Ideal para ocasiones especiales, reuniones de negocios o simplemente para darse un capricho. Consejo: Reserva con antelación y menciona cualquier preferencia dietética, ya que son increíblemente atentos a personalizar la experiencia.

Estuvimos cenando y nos encantó. Pedimos un menú degustación, todo muy rico. Recomendado.

Restaurante más que recomendable y a la altura de su prestigiosa estrella. Inmejorable calidad,presentación y servicio. Además la decoración y el espacio entre mesas marcan la diferencia según llegas. A tener en cuenta que es muy difícil aparcar cerca.

Ambiente muy ruidoso y recibimiento y despedida muy fría. Los aperitivos los encontré muy flojos (los pimientos fritos no casan con las elaboraciones posteriores, seguramente sean capaces de conseguir algo mas complejo con su sabiduría) no obstante el menú fue a más y los postres estaban espectaculares. Sin duda es uno de los menús degustación más largos y con mejor precio de una⭐️Michelín. En general es bastante recomendable para iniciar los pasos como aficionado a la gastronomía.

Segunda vista a este restaurante. La primera nos gustó mucho y por eso volvimos. El local resulta elegante, con mesas amplias y distanciadas. Muy buen servicio, guardando bien los tiempos y atento a las peticiones del cliente. Nos defraudó totalmente el menú de noche, porque pusieron una caballa cocida como plato de pescado y venado como plato de carne. Muy arriesgado. Fallo incomprensible. Nos pusieron un plato alternativo, que es de agradecer.