Restaurante Casa Belio en Panticosa

Paisaje idílico eclipsado por gente maleducada y dejadez en el servicio de camping. Contratamos una parcela para tienda grande, la tienda apenas cabe en la parcela, y digo apenas porque no hemos podido ni asegurarla con fiabilidad debido a la falta de espacio. No ofrecen solución aún sabiendo que hemos pagado de antemano por un servicio con bastantes carencias. Si quieres un camping tranquilo tampoco es el tuyo, se publicitan como “camping familiar” pero deberían publicitarse como “restaurante” ya que aún a las 23 y pico de la noche se escuchan los chillidos de los clientes. Para llegar a los baños debes andar casi tanto como para subir Monte Perdido, y para salir de ellos haces el paseo de la fama en pijama recién duchada justo en frente de los clientes del restaurante si te alojas en parcelas con electricidad y todo ello para coronar la cima y encontrar 2 duchas de mujer (embozadas y llenas de pelo) para todo el camping. Sí, hay otro camino para subir desde los aseos pero da la vuelta entera al camping. No tienen ningún control por la noche, cada persona hace lo que quiere, puedes llegar a las 2 de la mañana riendo, tirando cosas despertando a todo el mundo y nadie te dice nada. Camping ideal para jóvenes a los que no les importe las condiciones deficientes de las instalaciones y busquen divertirse un par de días en grupo. Vistas espectaculares y parcelas aseadas. Nosotros estaremos encantados de no volver y estoy segura de que el camping estará encantado de recibir a huéspedes menos exigentes.

Para quien busca un camping tranquilo y muy muy pequeño es el alojamiento ideal. Zona bungalows preciosa, vistas magníficas. Nos alojamos en una parcela buena, tamaño considerable y buenas vistas. La zona de fregaderos, a nada que llueva te empapas de arriba abajo. Servicios muy sucios, zona común que considero debe cuidarse especialmente dado que los que nos hospedamos valoramos como muy importante. Una pena… Además, para acceder hay que dar la vuelta al ruedo (entiendo la necesidad de que exista la rampa para quien la necesite), pero creo que si se añadieran unas escaleras de acceso directo, sería mucho más cómodo. Además al acceder a los baños parece que entras a una caseta de obra…

La ubicación es inmejorable y la atención de los trabajadores lo mismo. Nosotros estuvimos una noche instalados en una parcela con dos tiendas, la parcela enorme y bien cuidada, los baños super limpios y las instalaciones del bar y alrededores todo muy acogedor. Pero me gustaría hacer una sugerencia, y es que así como parcela y precio me pareció correcto me dijeron que si va una persona sola el precio de la parcela es el mismo. Voy muchas veces solo, y con media parcela de esas es más que suficiente para una tienda pequeña pero no está la opción.

Buena atención Buenas vistas Buena y variada comida Inmejorable

Pequeño camping en ubicación única. Merece la pena amanecer en un sitio así. El restaurante es buenísimo, con productos y cocina excelentes.

Lugar para relajarse con buenas vistas y comodidad. Lo único, las farolas hacen demasiada luz por la noche y empañan ver el cielo estrellado. Si tuvieran detector de presencia por ejemplo, haría el lugar excepcional incluso de noche. No dispone de piscina propia, pero la municipal está tan cerca que llegas andando en un momento.

¡Un lugar increíble para alojarse en Panticosa!

Solo pasamos un par de noches allí, el finde después de semana Santa y el restaurante estaba cerrado. Pero la experiencia con la chica que nos atendió por whatsapp fue muy buena, buena comunicación y muy buenas instrucciones de todo el complejo. Nos alojamos mi pareja y yo en un bungalow y se estaba genial, muy tranquilo. No le pongo 5 estrellas porque había hormiguitas en los cajones de la cocina y por la encimera (es normal teniendo en cuenta que se encuentra en un lugar alejado con bastante bosque alrededor) pero con un mejor aislamiento de la casa se podría evitar esto. He de decir que no usamos la cocina, pero la cama y el baño estaban limpios y muy confortables. Lugar recomendado!

Excelente restaurante de comida tradicional con elaboración meticulosa en un enclave muy bonito entre montañas cerca de Panticosa. Servicio cercano, todo en su punto, carne muy buena con un arroz meloso con longaniza y un carpacio de pato con foie sorprendentes.

Muy bien. Conforme a expectativas. Una sorpresa en Panticosa. Rápidos y atentos sin pretensiones. Buena relación calidad precio. Repetiremos