Restaurante Capone en Torrelodones

fuimos el martes a comer unas delicias de queso y una pizza de 4 quesos todo buenísimo y la atención del camarero buenísima muy sonriente y pendiente de todo. volveremos

Cenamos dos pizzas medianas por un precio estupendo y estaban estupendas, las pedimos por teléfono y solo tardaron un cuarto de hora. 100% volveríamos a pedir.

Pedimos : - pizza barbacoa: llevaba demasiada salsa y estaba quemada por los bordes sabiendo muy fuerte dicha salsa. - pizza queso de cabra y cebolla caramelizada: demasiado dulce. - pedimos tres tipos de pasta con diferentes salsas y una estaba buena (boletos) mientras que las otras dos están salada y la otra muy fuerte ya que era salsa marsala y debía estar hecha con algún licor. Todo regular, lo bueno que la terraza estaba de lujo y había poca gente. Comida regular, hace años era mucho mejor!

de 10 .. la comida riquísima, servicio rápido y de buen humor ( que ahora cuesta encontrar) precio más que justo para lo que ofrecen, hoy en día no encuentras muchos sitios así .. a destacar el chico que atendía .. el solo, y como digo con una sonrisa

Buena comida y buen servicio en una terraza agradable.

Un poco ruidoso, y la climatización es mejorable, ya que el aire acondicionado solo enfriaba la mitad de la mesa, pero la comida fue excelente y abundante, y el servicio, rápido Ideal para grupos grandes.

Hemos comido ahí en sábado así que nada de menú del día. No es un italiano de solo pasta y pizza, que las hay, sino que han innovado, con acierto me parece, especializándose en saltimbocca y lo que llaman molletes. El saltimbocca que preparan es el escalope ilustrado (parecido a la “milanesa a la napolitana” de la Argentina), un escalope bien frito (bien frito significa aquí frito como se debe, no muy frito) sobre el que se dispone una cobertura variable (salsa de tomate, distintos quesos, jamón, huevo frito) y se gratina un poco, sin pasarse. Viene bien acompañado de patatas (bien) fritas. Yo recomiendo el sencillo y sabroso saltimbocca con mozzarella, tomate crudo, aceitunas y rúcula. Una ensalada (por ejemplo de endivias al Roquefort) y un saltimbocca compartidos entre dos es suficiente para una comida tras la que tienes cosas que hacer. Los molletes se basan también en dos escalopes (de cerdo, pollo o ternera) con cosas en medio. Una buena elección para jóvenes después de un día de ejercicio. El servicio amable, rápido y atento. El local tiene una terraza que debe usarse al atardecer porque a mediodía de un día caluroso reverbera. El interior es muy agradable. Bonus: suena música de los 60 y 70 de fondo, no de protagonista. The Hollies, América, Jefferson Airplane…