Restaurante Amor al Plato en Madrid

Buen sitio para tomarte unas cervezas y picar por la zona, aparte la vez que estuve con unos amigos llevaron un DJ que creó muy buen ambiente.

Bar Restaurante de barrio, muy bien atendido, comida buena y normal de precio.

Haga frío o calor en AMOR AL PLATO se come lo mejor Os recomiendo arroz chaufa de marisco Con un buen vino de Rivera de Duero y creo que también pega con un buen vino blanco Por cierto todos los camareros muy bien pero la camarera Mariana espectacular

Me encanta siempre el ambiente que hay y el buen trato de camareros/as. La comida está rica y la terraza es una delicia porque la acera es ancha aunque los coches pasan bastante en esa calle.

Bebidas (café, refrescos y cañas) a 2,5 euros (al menos en la terraza). El camarero no ha tardado mucho en servir y nos ha traído un platito para tres personas con paella.

Buen ambiente y comida riquísima. Por 12€ una hamburguesa buenísima. Todo esto acompañado de un gran anfitrión. 100% recomendable.

Si estás buscando un lugar donde puedas disfrutar de una deliciosa hamburguesa, un excelente servicio y un ambiente acogedor, el restaurante Amor al Plato es definitivamente la elección perfecta. Ubicado en el corazón de Tetuán en Madrid, este restaurante es un verdadero tesoro escondido.

Fuimos un grupo de amigos con niños; nos dejaron toda la parte de abajo para nosotros con la zona infantil, el servicio de los camareros maravilloso; hubo una confusión con un plato de croquetas y lo solucionaron sin problema; los precios muy bien y la calidad de la comida muy muy rica; 100%recomendable

Un gran descubrimiento, dos locales, buena comida, insuperable la tortilla, el embutido o las alitas de pollo. Buena carta de vinos tintos y blancos. Los tercios bien frios de Mahou o Estrella. Y lo mejor el personal, amable, servicial, atento, BRAVO. Gracias a todos

El salón de la planta baja está muy dejado y sucio. Las paredes necesitan una manita de pintura, muy mala imagen tener a la vista todo el almacén con cajas por todas partes. La zona infantil está muy sucia y con juguetes rotos, en general, dejadez es la palabra. Temperatura bien y ambiente tranquilo. El servicio muy bueno, los chicos muy atentos, pedimos varias cosas y tardaron un tiempo prudencial en servir. La comida en general, buena. Raciones abundantes y bien servidas. Las patatas se nota que se fríen en el momento, muy ricas. Pedí entraña con guarnición, bien cocinada al punto y muy rica la carne. La fritura de pescado también muy buena, producto fresco y bien cocinado. Le pongo pegas a la ensalada, bañada en salsa muy fuerte, avinagrada, debería servirse la salsa a parte, no pudimos ni comerla. Las croquetas muy ricas, también los huevos rotos con jamón.