Restaurant Semproniana en Barcelona

Ayer fui a comer con un vale que me regalaron para reyes para dos personas, nos atendio Ada en persona muy amable, y la comida excelente volvere con mi familia y recomiendo el restaurante de 10

La comida es espectacular ya un precio bastante ajustada.

Gran experiencia. Menú cata muy buena. Servicio muy correcto y un trato inmejorable, muy cercanos. Como detalle... Celebrábamos un cumpleaños, y Ada no ha dudado en ponernos la vela y ha tenido el detalle de regalarnos uno de sus libros!!!

¡Tenía pendiente ir de toda la vida! Trato exquisito y profesional, sin artificios, muy directo. Comer honesto, claro y sincero, excelentes propuestas tanto clásicas como novedosas. Una gran experiencia, buena relación calidad/precio. que no le invitaron a cava, y escriben malas reseñas: práctica muy habitual, que los restauradores no se atreven a denunciar. Volveré muy pronto, Ada!

Ayer disfruté del restaurante y me gustaría hacer una reseña constructiva, ya que el sitio tiene mucho potencial. Puesto que mi experiencia no fue del todo positiva, comparto mi punto de vista, completamente personal. Puntos a mejorar: Tablas: Hay muchas tablas en un espacio limitado. Nos sentamos en una mesa para dos personas, al final de la sala, rodeados de una mesa grande para un mínimo de diez personas, otra mesa de cuatro delante y otra de cuatro al lado. La sensación era un tanto asfixiante, con un bajo nivel de intimidad conversacional y, aunque no quisieras, acababas escuchando todas las conversaciones de los alrededores. A mí, personalmente, no me gusta no tener espacio vital, y cuando la gente de la mesa mayor se levantaba, casi te tocaban, lo que no ayudaba a crear el mejor ambiente. Quizás, reduciendo el número de tablas o midiendo mejor las distancias entre ellas, se podría evitar esa sensación. No obstante, entiendo que hay razones económicas vinculadas al número de tablas disponibles. Vasos: Pedí agua y mi vaso estaba roto, con riesgo de cortarse el labio. Esto me parece incomprensible. Cubiertos: Pedimos un menú Cata. El primer plato (el que más me gustó) constaba de seis mini-platos para degustar, muy bueno y variado. Al terminar, dejé los cubiertos sobre el plato, como es habitual, para evitar que el sabor de los cubiertos se mezcle con el siguiente plato. Pero la camarera que retiró el plato me pidió que volviera a ponerlos en la mesa, lo que me dejó de piedra. Amablemente le dije que no y le pedí que los cambiara, por favor. Accedió, pero acompañando el acto con una mirada algo particular. No entiendo por qué quiso hacerme sentir mal para pedir el cambio de cubiertos, una práctica que, por otra parte, debería ser automática sin necesidad de preguntar. Puntos por los que vale la pena ir: El sitio: La decoración es una cuestión personal. A mí, particularmente, me gusta una decoración más uniforme, pero lo que importa es que el sitio tiene alma. El personal: Aparte de la camarera de los cubiertos, todo el personal fue muy agradable. La propietaria, que no sabía que tenía una cuenta con muchos seguidores en Instagram, se mostró realmente amable, saludando a todas las tablas, lo que ayudaba a crear una magia especial en el ambiente. La comida: La relación calidad-precio de la experiencia es muy positiva. Realmente han creado un menú apto para "cualquier" bolsillo, que permite disfrutar de la cocina de este particular restaurante. En resumen: Pongo cuatro estrellas por los hechos mencionados, pero fácilmente pudieron ser cinco. ¡Recomiendo a todo el mundo venir y disfrutar de su cocina!

Buenísima comida servicio y ambiente. Un 10 a la cheff

LOCAL: a mi me encantó el local!!!.............comedor muy diáfano, con una decoración muy ecléctica pero con una armonía en el fondo. Parece contradictorio, pero yo lo percibí así. Por ejemplo...........todas las lámparas son diferentes, pero todas tienen una relación con la cocina. Todas las sillas son diferentes, pero todas tienen un estilo clásico............etc, etc, etc, PERSONAL: la persona que nos atendió nos trato muy bien. COCINA: típica cocina catalana, muy casera. Te hacen esos platos hogareños que hechas de menos cuando sales a comer fuera. Buen producto y muy bien cocinados. AMBIENTE: muy bueno. RELACION C/P: muy correcta.

Restaurante de toda la vida, con una excelente calidad de comida, y un servicio muy atento. ¡Muy recomendable!

Servicio muy bien. Comida deliciosa !

Restaurante espacioso donde comimos un grupo de 10, buen servicio y amable. Hicimos un menú de grupo con 6 o 7 platillos que permiten disfrutar de varias alternativas . Cocina quE gusta sin necesidad de intentar sorprender.