Pez Tortilla en Madrid

Sábado 15:11h y solo hicimos 10’ de cola! Cogimos mesita para 4 y probamos varias. La clásica con cebolla, brie con trufa y jamón, bacon y la de cebolla caramelizada con queso rulo. El punto de la tortilla es perfecto! 👌🏼 todas estaban buenas pero la mejor la de jamón.

Buen pincho de tortilla clásica con cebolla caramelizada y buen vermut ( tienen variedad de tortillas )

Está delicioso y el ambiente es genial. Tienes que encontrar tu propio asiento y luego pedir en el bar.

¡Súper tortilla! Ambiente muy espartano, pero servicio rápido y amable. ¡Precios superiores!

Las croquetas de carrilera estaban muy ricas y recién hechas. Me gustó las opciones de cervezas que tenían. Considerando que el lugar se especializa en tortillas, estas no nos gustaron, probamos la de cabra y chistorra. Estaban sin mucho sabor, muy frías que parecían refrigeradas. Pedimos si podían calentarlas y nos dijeron que no tenían microondas. De seguro caliente hubieran mejorado muchísimo. El lugar es para comer rápido y salir. Precios acordes y económicos. Quizás fui en un mal día. De seguro le doy otra oportunidad. Igual recomiendo ir a probar.

Un verdadero hallazgo para los amantes de la cocina casera española, especialmente si eres fan de la tortilla de patatas y las croquetas. Este lugar ofrece exactamente lo que promete: sabor auténtico, calidad constante y precios muy asequibles. La tortilla es, sin exagerar, de las mejores que he probado fuera de casa. Jugosa por dentro, bien cuajada por fuera, con ese equilibrio perfecto entre el huevo y la patata, sin excesos de aceite y con un punto de sal impecable. Se nota que no es algo improvisado ni de producción en masa: hay cuidado en la preparación y respeto por la receta tradicional. Las croquetas no se quedan atrás. Probé varias —de jamón, de boletus y de bacalao— y todas estaban deliciosas. Cremosas por dentro, con una bechamel suave pero con carácter, y un empanizado crujiente sin estar grasiento. Son de esas croquetas que sabes que fueron hechas ese mismo día y con buenos ingredientes, no las típicas congeladas sin alma. El ambiente es informal y bastante animado, sobre todo a la hora de la comida y por la tarde. Se llena con facilidad, lo cual tiene todo el sentido: buena comida, buen precio, y un servicio rápido y sin pretensiones. Afortunadamente, tienen dos locales casi uno frente al otro o a pocos pasos de distancia, así que si uno está muy lleno —que suele pasar— puedes darte la vuelta y ver si el otro está más tranquilo. Esa cercanía entre los dos espacios permite que casi siempre encuentres sitio sin tener que esperar demasiado. Es el tipo de sitio al que volverías sin pensarlo dos veces, ya sea para una comida rápida, para llevarte algo a casa o simplemente para darte un gusto sin gastar mucho. No es un restaurante elegante ni lo pretende, pero su éxito está en lo esencial: sabor, sencillez y precios justos. Recomendadísimo si estás por la zona y quieres probar una tortilla de verdad

Increíble todo! Las tortillas espectaculares la de parmesano y la de txistorra. Nos atendió una chica rubia y un chico supermajo con el pelo que parecía un nido de cigüeña ( les preguntamos los nombres pero por lo que sea se nos han olvidado) camareros top de majos. Para volver siempre!!!...y si lo.lee el jefe... subirles el sueldo que se lo merecen.

Tomamos croquetas variadas y probamos varias tortillas. Me quedo con la clásica las demás me parecen demasiado innovadoras y no me entusiasmaron. Ideal para el que le guste las tortillas poco cuajadas. Buena relación calidad precio. Merece la pena., repetiremos si estamos por la zona.

Un lugar singular, pero las tortillas son únicas, no hay reservas, en la calle siempre hay cola, y te van pasando como haya lugar, la tortilla con queso brie está espectacular, por favor que la pidan

Nos enteramos de este lugar gracias al canal "La latina" y después de un largo día de caminata, al no haber tenido casi nada que comer en todo el día, sentimos que era el momento adecuado para probarlo. Era un día frío, y entramos. La calidez fue lo primero que notamos. Tenían mesas pequeñas con taburetes altos, un entorno moderno encantador. Pedimos 2 tortillas clásicas, 2 patatas bravas (un plato que mi esposa estaba ansiosa por probar) a, d Pequeñas Coquetas Fifilledith hongos. La comida Ststartedllegando rápido y no podríamos haber sido más felices. Todo era tan abundante, reconfortante a, d rico en sabor. La tortilla era excelente. En realidad estábamos tratando de encontrar el mejor en Madrid, pero después de este, siento que no sería necesaria ninguna otra búsqueda. Las patatas bravas eran tan buenas que no podemos esperar a comerlas de nuevo. Todo y toda una comida reconfortante para el alma.