Parador de Turismo en Plasencia

Este es un convento reutilizado muy grande con una hermosa piscina, patio y áreas ajardinadas. Parece ser el favorito de turistas, ciclistas y motociclistas, como vimos en los tres grupos. Las comidas que comíamos en el refectorio eran extraordinariamente buenas. El venado en salsa sobre una cama de piña fue absolutamente espectacular, perfectamente cocinado. La lubina estuvo perfecta, lo mejor del viaje, y el postre de mousse de cerezas con salsa de frambuesa fue excelente. Sin embargo, se necesita paciencia de Jobe debido al servicio lento ya que el servicio es muy escaso. ¡Se vio que el personal literalmente casi corría de mesa en mesa! Si desea aparcar su coche en el garaje del Parador de Plasencia y no tiene miedo de utilizar un ascensor de garaje (literalmente introduce su coche en un ascensor de gran tamaño y desciende al nivel de aparcamiento mientras está en su coche), aquí tiene un enlace de mapa de Google. hasta la entrada del garaje por la Calle Higuerillas https://goo.gl/maps/S7XMVQvFN1RLGnov9. Su automóvil no debe ser demasiado grande y debe sentirse cómodo estacionando en espacios reducidos (mi automóvil era un "SUV pequeño" y la experiencia fue buena, pero se necesitaba cuidado). Llama cuando estés en Higuerillas y te abrirán la puerta del garaje (15€) o aparcarás en la calle (lo cual no recomiendo por seguridad y por estar al aire libre bajo el sol). También puedes conducir hasta la entrada principal del Parador dentro de la Ciudad Vieja, dejar tus maletas y luego estacionar (lo cual no recomiendo ya que implica conducir por calles muy estrechas y con muchos peatones). El suministro de agua caliente para la ducha variaba enormemente en temperaturas desde demasiado caliente hasta no lo suficientemente caliente. Esto definitivamente necesita atención.

Es un lugar con un encanto muy particular

Espectacular parador atendido por un personal amabilisimo. Excelente ubicación.

El Parador de Plasencia es el antiguo convento Dominico, edificio maravilloso como todos los paradores de estilo renacentista, merece una visita y si puedes hospedarse lugar desde donde podrás visitar la ciudad cómodamente

Muy bien ubicado, en su tiempo fue una cárcel. Muy bien ambientado.ss

Ha sido un verdadero placer alojarse en esta maravilla de sitio. Tanto trato, desayuno, habitaciones e instalaciones de 10. Sin duda, nos vamos con muchas ganas de volver.

El convento donde se encuentra el restaurante es una maravilla que merece la pena disfrutar, y si la comida acompaña como es el caso, la experiencia es completa. Mención especial para el personal, que es amabilísimo

Platos muy ricos y presentados. Atención del metre por hacernos la gastro parada. Servicio de comedor muy atentos y buenos consejos gastronómico.

En un edificio magnífico, el comedor no lo es menos. En la carta destacan platos regionales muy bien tratados y presentados. Muy rico todo lo que probamos.

Solo por la maravilla de comedor, ya vale la pena. El servicio es de alta calidad y la comida en general, muy bien y con productos de calidad. Los desayunos también destacables.