Paquita Mariví en Burgos

Fuimos a cenar un viernes, estaban todos locales abarrotados, fuimos aquí a cenar y la verdad esque la comida no estaba muy allá. Pedimos unas patatas bravas que estaban llenas de salsa y pimentón de manera exagerada, unas croquetas de morcilla y foie que estaban buenas, y unas albóndigas de potro que aunque la carne era deliciosa la mezcla con salsa de queso lo estropeaba enormemente. La atención de la camarera fue eficaz y amable

Buen sitio, la Cordobesa excelente,

Las Bravas deliciosas! La camarera Cordobesa Super tambien. Genial

Paramos a probar las bravas. Buenísimas! Tienen torreznos, guindilla y una salsa muy rica. El servicio un 10. Un poco cara las bebidas, pedimos gaseosa y te la sacan en un vaso en vez de sacarte el botellín como con la coca cola por ejemplo.

Local con mucha clase. Amplio y elegante. Céntrico pero no para ir en coche. Fuimos por las patatas bravas y no nos decepcionaron. Es más local de copas tranquilo. Buen servicio.

La comida está muy buena, original. Quizás las delicias de morcilla… demasiado fritas! La ensaladilla de pulpo muy buena y la especialidad: Las Bravas son un imprescindible!! Las camareras muy simpáticas y atentas.

Buenas tardes Me da mucha pena escribir esto, porque he sido una enamorada de Paquita Marivídesde que abrieron. Era un sitio que cuidaba cada detalle: la copa perfecta, el vino bien elegido, un servicio atento y profesional... Y unas patatas bravas que eran, sin exagerar, de lo mejorcito de Burgos. Pero en las últimas visitas , he notado que algo ha cambiado. Las bravas ya no tienen ese toque especial: unas veces llevan torreznos, otras no; a veces están bien hechas, otras no tanto. Y lo que más me sorprendió fue que, después de pedir otro plato, estuvimos esperando más de media hora sin que llegara, y tuvimos que anularlo,otro día no hubo cocina,en fin una lastima. No escribo esto con ánimo de criticar por criticar, al contrario. Lo hago con la esperanza de que vuelvan a ser ese sitio que tanto nos gustaba. Tienen todo para seguir siendo un referente en Burgos: el encanto, la cocina, el ambiente... Solo hace falta volver a ponerle ese mimo que los hizo especiales desde el principio.

No te puedes ir sin probar las bravas

Un bar super bonito, servicio amable y atento, la comida riquisima y un ambiente muy agradable, repetiremos!!!

El servicio bien pero la comida un poco decepcionante, leyendo las reseñas esperábamos otra cosa. Fuimos de más a menos: Primero pedimos, la ensaladilla, estaba bastante buena, el tartar que estaba muy bueno también, pero el queso ya nos empezó a decepcionar, ponía que llevaba mermelada de higos, nosotros no la vimos… precio excesivo para un simple plato de queso con trufa. Finalmente, pedimos los huevos rotos con bogavante que ahí ya nos terminamos de decepcionar, huevos pasados, y el bogavante se ve que lo rebozan y lo fríen, cosa que nos pareció un disparate… no tenía ni sabor, precio excesivo para lo que ofrecía.