Pabú en Madrid

Comimos el menú corto y la verdad que si no eres de muchísimo comer sales lleno. El servicio super atento y amable y la comida súper bien de sabor, especialmente el suflé y el espárrago. El ambiente y el sitio top, también. Merece la pena 100%

PABU Madrid, bajo la dirección del chef Coco Montes, es una de las mejores experiencias gastronómicas que he tenido recientemente en la capital. Probé su menú degustación de 8 platos y fue impecable de principio a fin. Platos honestos, creativos y perfectamente equilibrados, con el producto de temporada como absoluto protagonista. El ambiente es cuidado, con cocina vista y un servicio atento y profesional. Los postres mantienen el nivel: ligeros, equilibrados y muy bien pensados. Recomendación: Si buscas una experiencia diferente, reserva su menú de 8 pases. Cambia a diario y es un auténtico homenaje al producto fresco.

Estuvimos cenando el pasado sábado y fue una experiencia increíble. El chef Coco Montes es un verdadero artista en la cocina. A pesar de que los ingredientes parecían sencillos, cada plato estaba lleno de sabor y creatividad. La atención fue excepcional, el personal fue muy amable y atento en todo momento. El ambiente era acogedor y elegante. Cuidan hasta el más mínimo detalle (cubertería, vajilla, mantelería y los detalles del baño me parecieron geniales, pero !no haré spoiler!). Hubo varios platos que nos sorprendieron, donde cada bocado era una explosión de sabores y texturas. Coco Montes tiene un don para combinar ingredientes y crear platos sublimes. ¡Es un sitio al que, sin duda, volveremos para seguir disfrutando!

Para mí el mejor restaurante de Madrid, con total y absoluta seguridad. Coco Montes es un genio, ha conseguido que alguien a quien en general no le gustan las verduras disfrute como un enano con todas sus propuestas, diferentes en cada ocasión y cada vez mejores. Y su bodega es espectacular, sobre todo su selección de vinos añejos.

Menú degustación exquisito del primero al último plato.Buen servicio.Buena distribución de las mesas para tener la intimidad necesaria que siempre te apetece.Totalmemte recomendable para una ocasión especial.

Restaurante encantador. Producto fantástico hecho de la manera correcta. Mención especial a la carta de vinos. Muy bien pensado y estoy muy agradecido de poder probarlo todo por copa. Algunos pequeños detalles a mejorar en el servicio, pero nada que pueda afectar tu experiencia.

Pabú, que lleva el nombre de los dos menús que ofrecen, reúne recuerdos de la ex chef de L'Arpège, Coco Montes, centrándose en la estacionalidad. "Pate" o padre, es el menú de 8 platos y "Bubú" o madre, tiene 6 platos. A base de legumbres, cereales, mariscos y más, muchos de ellos provenientes de Madrid y sus alrededores, Montes cocina de una manera que desafía y emociona, manteniendo siempre un elemento de comodidad y relatividad, lo que lo hace altamente identificable. De particular interés es la carta de vinos. Menos preocupante es la forma en que no retiran cada vaso durante la comida. Esto deja la mesa un poco abarrotada al final. "Son muchos vasos", le dije a nuestro sumiller. "Eso parece felicidad", bromeó.

Vegetales de lujo Como gran amante de la carne, nunca pensé que iba a disfrutar tanto de un menú de 6 pasos solo a base de productos vegetales (menos uno de ellos con salmón). El mimo en la preparación de los platos y los excelentes ingredientes utilizados hacen que cada plato sea una delicia. Todo es fresco y el menú depende de lo que llegue cada día de las huertas que tienen concertadas. La atención inmejorable desde el momento de la llegada hasta que abandonas el local. Profesionalidad y cercanía al mismo tiempo. Un local moderno en su concepción, pero con mobiliario más clásico y doméstico que da un contrapunto agradable. Una selección de vinos fabulosa con una sumillier exquisita en el trato, en el conocimiento y en las explicaciones que te regala. Además, permiten que te traigas tú algún vino que tenga para ti un interés especial. Cobran por el descorche de la primera botella 40 € y 60 € por la segunda. Por mencionar algo mejorable, en mi opinión el tiempo de arranque del menú es un poco lento ya que desde que llegamos hasta que tomamos el primer bocado pasan 40 minutos.

Toda la delicadeza de la gastronomía del talentosísimo chef se siente a la entrada de este maravilloso restaurante del barrio del Bernabéu. Maravillosa decoración, personal muy amable y profesional dirigido por la maravillosa Rita, la directora del restaurante. Y una buena porción de vino y las elecciones hechas por el excelente sumiller. Y la comida maravillosa y delicada. Excepcional e inolvidable. Bravo el chef!

Excelente restaurante con menú de temporada. Nos gustó muchísimo todo lo que comimos, lo que bebimos y lo bien que nos atendieron.