Nacional en Madrigal de la Vera

Hace honor a su nombre, tiene un patio espectacular lleno de plantas incluyendo plataneros que parece que estás en un país tropical. El desayuno, incluido, espectacular!

Excelente lugar trato muy agradable

Antiguo hostal modernizado con amplia zona de jardines, todo decorado con muy buen gusto. Nuestra habitación correcta aunque la persiana no se podía usar y el baño podría ser mejorable.

Sitio perfecto para tomar una copa en verano,muy agradable,muy bien decorado .Y para desayunar genial,el zumo de frutas y la tostada de aguacate buenísimo!!Recomendable 100%

Preciosa casa con jardín y bar. ¡Precio para 3 personas: solo 85 €! ¡Excelente!

Un lugar ideal para alojarse en la zona. Con un espacio de ambiente propio chillout que se ve trabajado y con gusto. La atención estupenda por parte de la chica de recepción. Sin duda lo recomendaremos y volvemos pronto.

Sorprendido con todas las malas críticas, ya que hemos comido aquí 5 veces en una semana. Hemos comido los huevos revueltos y las tostadas o tortillas y tostadas o tortilla española y ¡no podemos echarle la culpa a esto ni un poquito! No puedo comentar sobre la otra comida, pero pensé que el precio que pagamos por esto en comparación con otros lugares es muy razonable. A veces encontramos un pequeño retraso cuando está ocupado

Excelente! Muy buena atención, limpio , confortable ,en una buena zona . La zona de la entrada para desayunar increíble bonito y tranquilo. Volveré encantada?✨✨

Una estancia maravillosa que supera expectativas Desde el primer momento, el trato recibido fue excepcional. El personal es encantador, cercano y siempre dispuesto a ayudarte con una sonrisa. Se nota que hay vocación y cariño en lo que hacen, y eso marca una gran diferencia. El desayuno fue otro de los puntos fuertes: productos de calidad, con opciones variadas y servidos en un ambiente tranquilo y acogedor. Nada como empezar el día con buen café y pan recién hecho rodeado de calma. El jardín es simplemente precioso. Cuidado con esmero, lleno de rincones con encanto donde poder desconectar, leer o simplemente disfrutar del entorno. Un verdadero oasis de tranquilidad. En resumen: un lugar al que volvería sin dudarlo. Cuando un alojamiento combina belleza, comodidad y personas que lo gestionan con dedicación, se convierte en una experiencia especial. Y solo un apunte final: ojalá todos los clientes valoraran con más empatía el trabajo que hay detrás de cada detalle. A veces una reseña negativa dice más del huésped que del lugar. 💛

Las habitaciones tienen un aislamiento acústico deficiente. La recepción no siempre cuenta con personal. Todo el hotel es para no fumadores, incluyendo el balcón de la habitación y el patio.