Mar de Crebas en Corcubión

Un lugar increíble!!!La comida producto local super fresco y hecho en el momento y Miguel y Tamara dos personas increíbles y atención inmejorable.Recomendable al 100%.

¡Una auténtica joya! Descubrimos este lugar casi al final de nuestro Camino, y resultó ser uno de los momentos más destacados del viaje. El marisco era fabuloso: fresco, cocinado a la perfección y rebosante de sabor. Cada plato sabía a preparado con mucho cariño y orgullo. Pero lo que hizo la experiencia realmente especial fue el personal. Amables, divertidos y maravillosamente atentos, nos hicieron sentir no solo como huéspedes, sino como parte de la familia. Sus risas, su conversación amena y su genuino cariño hicieron de la cena algo inolvidable. Nos sentimos como en casa, justo cuando menos lo esperábamos. Una auténtica sorpresa en casi nuestra última noche en el Camino, y sin duda, la mejor comida de nuestro viaje. Una auténtica delicia de principio a fin. ¡Muy recomendable!

Comida muy sabrosa y servicio muy amable!

Miguel, el Chef nos ha deleitado con una cocina a baja temperatura, exquisita, el pescado en su punto, tanto el Calamar Plancha como la Merluza, acompañados por guarniciones sabrosas y una presentacion muy cuidada. El Restaurante tiene terraza con vistas a la Ria. Muy recomendable.

Fueron hace 3 días y fue espectacular. Estaba todo super bueno, producto fresco y del día, el pulpo impresionante. El trato muy bien. Fueron muy amables.

Lo recomiendo sin duda alguna todo un placer haber comido allí,calidad del producto respetando su sabor.Volveremos cuando podamos

Delicioso restaurante de pescado (y carne) frente al mar. Cocina refinada, creativa, ligeramente picante y sabrosa, un lujo para los franceses que hacen el Camino de Fisterra. ¡La primera vez que no comimos desde que salimos de Ribadeo! Un chef encantador. Muy buen servicio. ¡Lo recomendamos!

Lugar encantador igual que la gente que atendia allí. Vistas estupendas y comida magnifica

Pintoresco restaurante en la Ría de Corbucíon en Cee. Fue un hallazgo maravilloso mientras caminaba por el borde del agua. Las vistas desde el exterior eran agradables. El servicio fue excelente. El menú increíble. El personal es amable, servicial y amable. El menú cambia cada martes y algunos platos con más frecuencia se basan en ingredientes frescos y la creatividad de Miguel, el propietario y chef. Disfrutamos de “un picoteo” de almejas en salsa de vino de Alberiño servida con pan fresco (! ) y un trío de mantequillas saborizadas (aguacate y frutos secos, curry, queso azul infusionado) . Miguel mostró un evidente orgullo por su restaurante y menú. Las almejas estaban frescas y perfectamente preparadas. La salsa de almejas fue bien disfrutada con el pan fresco. Estábamos muy contentos de haber encontrado esta cocina local. Vale la pena visitarlo.

El servicio fue muy atento. Cada plato era excelente. Teníamos los Conkle y gallineta. Ambos fueron excelentes. Comimos pastel de chocolate de postre. ¡Otra vez, excelente!