Licar Sada en Sada

Fuimos a comer tres personas y una perrita pequeña Naturalmente comimos marisco Nos atendió el dueño muy amable y servicial como el resto de personas del local La comida excelente, no es la primera vez que vamos y siempre que volvamos a Galicia seguro que repetiremos, para mi es uno de los mejores restaurantes de la zona, si no el mejor

Fuimos a comer tres personas y una perrita pequeña Naturalmente comimos marisco Nos atendió el dueño muy amable y servicial como el resto de personas del local La comida excelente, no es la primera vez que vamos y siempre que volvamos a Galicia seguro que repetiremos, para mi es uno de los mejores restaurantes de la zona, si no el mejor

Llegamos sin reserva y nos atendieron si problema. Los arroces riquísimos y una cantidad muy abundante. Personal amable.

estuvimos el domingo 10 de agosto y bien la calidad, pero la cantidad de las raciones ya no son lo que eran, por ejemplo la ración de calamares era la mitad de cualquier sitio, todo cambia a menos.

Hemos comido arroz con Bogavante y Licar, ambos ricos y sabrosos. Nos han recomendado ajustar las cantidades que pedíamos ya que ambos eran muy abundantes. El salpicón de rape y gambas también rico. Sin embargo, los entrantes destacaban menos y las cantidades mucho más reducidas, especialmente las ensaladas.

Uno de mis restaurantes favoritos… Las raciones son súper abundantes, una de arroz da para tres personas por lo menos. El personal es muy profesional y muy majo, incluso en días de mucho trabajo como puede ser el Día de la Madre, Día del Apóstol, etc… Sin duda se pide perdonar cualquier “fallo” que puedan tener porque lo cubren con creces. Cualquier visitante que vaya a Sada debería de probarlo.

Hacía años que no iba a este restaurante. Reservé porque lo intenté con otros dos antes y no había manera de que cogieran el teléfono. Y al hacer la reserva tuve en cuenta los últimos comentarios poco favorables. Afortunadamente nada que ver con las críticas negativas que he leído. Reserva admitida a la primera, mesa amplia en terraza y mesa con mantel, que cada día se ve menos. Tras unos minutos de ojear la carta digital (los precios que se ven en las fotos son muy antiguos; sumar entre 3 y 5€ a la mayoría de los platos), pedimos y nos recomendaron. Mientras la terraza se fue llenando y de público local y por la relación con el dueño y los camareros, más que habituales. La cocina igual algo lenta, pero el resultado bueno. Pulpo espectacular, pescado rico y raciones generosas. Y la tarta de queso de postre muy rica. No percibí esa bordería que critican, los camareros muy correctos y profesionales, y lo cierto es que volveré.

Llevo viniendo al Licar desde que tengo memoria, y si algo lo define es la constancia en la calidad. Todo lo preparan al momento, con producto fresco , y eso se nota en cada plato. Sería difícil quedarme con algo concreto, porque todo está espectacular, pero si tengo que elegir, me decanto por el arroz con bogavante. Eso sí, hay que tener en cuenta que un arroz hecho desde cero no se hace en 15 minutos. Parece de sentido común, pero todavía hay gente que no lo entiende. El otro día escuché una mesa protestar por eso y me dio la sensación de que no habían pedido un buen arroz en su vida. Un arroz se cocina como se tiene que cocinar: sin prisas, con mimo y respeto al producto. El trato es otro de los puntos a destacar: cercano, familiar, como en casa. Es de esos sitios al que se puede ir a ciegas porque sabes que no falla.

Uan excelente atención acompañada de unos divinos calamares y navajas. Hay una variedad interesante de mariscos y una vista bonita al puerto.

Excelente restaurante de pescado y marisco. La lubina, el rape (a la romana o en salsa), los arroces y los chipirones están siempre en su punto. Producto de primera: percebes, cigalas, camarones, almejas… todo espectacular. La atención es muy buena, aunque a veces hay algo de espera si está lleno. En esos casos, pedir para llevar es una gran opción. Recomendadísimo.