Lexi's en Barcelona

Un pelín caro y los mojitos les falta (punch) pero pasable

Sí vas a tomar un cocktail o otra bebida después de cenar deberían avisar cuando piensan cerrar, nos trajeron vasos de plástico sin avisar que cerraban, estaría bien informar pues nos podríamos haber quedado o podríamos haber ido a otro sitio. El cocktail margarita de limón correcto.

Las patatas bravas son imprescindibles. Todo lo demás estaba mediocre. El tartar de atún estaba demasiado caliente al servirlo, la smashburger tenía demasiados ingredientes que le restaban sabor a la experiencia, y el filete, sinceramente, sabía a viejo.

Muy rica comida, platos muy bien presentados, abundantes y con un muy buen servicio. Los precios no son los de el restaurante más accesible pero buen lugar si queres ir a pasar una noche especial de vez en cuando. Lo único extraño es que cobren el 10% extra por atenderte en otro lugar llamado “terraza” que ni siquiera es una terraza sino que son tres mesas en una vereda donde los mozos no tienen que caminar ni 3 metros para atenderte… Una pena porque eso muchas veces lleva a no dejar un extra de propina a los empleados del local ya que te lo están cobrando por otro lado. También el aumento de las bebidas a partir de las 00hs, para bebidas más populares y baratas como la cerveza no tengo crítica, pero si en una carta con un 98% de bebidas alcoholicas, que quienes no tomamos alcohol encima nos aumenten el precio de la bebida pasadas las 00h es un impedimento más, sumando al de la poca variedad que hay para elegir entre bebidas no alcoholicas. De todos modos recomiendo!

Estábamos juntos, gente de todas partes del mundo, y disfrutamos mucho de la noche.

¡Excelente! El personal es amable, atento y muy servicial. La selección de productos es excelente, de muy buena calidad y frescos. ¡Muy satisfecho, lo recomiendo ampliamente!

Fuimos a tomar algo sobre las 18:30 y nos negaron una mesa a menos que fuéramos a comer. Todo el mundo sabe que en Barcelona la hora de la cena no empieza hasta las 20:00 aproximadamente. Lo más curioso es que casi todas las mesas estaban ocupadas por gente que solo bebía, sin comer.

Me há guustado mucho, super recomendable

Buena comida pero la porción era pequeña y tuvimos que pagar extra por sentarnos afuera sin avisarnos antes.

Qué lugar tan bonito, solo tomamos unas bebidas, pero Alex fue realmente genial e hizo que nuestra experiencia fuera genial.