L'Atzucac en Valencia

Comida tradicional pero con un toque que la convierte en algo mucho más elaborado. No tiene carta, funciona con menú ya establecido que va cambiando (creo que nos dijo cada 2 semanas aproximadamente). El menú de día son 20€ e incluye 3 entrantes y un arroz y el de noche son 35€ y está formado por 1 ensaladilla a compartir, que está fija en todos los menús, y 6 entrantes individuales y postre. Todo de muy buena calidad, con productos de mercado. Lo malo que puede pasar es que de todos los entrantes haya alguno que no te guste o lleve algún ingrediente que no te guste pero, si es posible, te lo cambia o modifica. A mi no me gusta el pimiento y me cambió la titaina por berenjena a la brasa, un gesto que me pareció estupendo y además estaba buenísima. El concepto del restaurante es ir a comer o cenar sin prisas, degustar la comida, estar de charreta tranquilamente y sin ningún tipo de estrés y en un ambiente relajado sin demasiado ruido, por eso no coge reservas para más de 14 personas porque está él solo que hace de camarero, cocinero y jefe de sala. Cuando lo leí en alguna crítica me pareció que iba a ser todo muy lento pero no, va sirviendo conforme te acabas el plato, sin agobios y casi sin esperas. Estábamos tan a gusto que nos olvidamos de los móviles, no hicimos fotos de nada y disfrutamos de la cena y la conversación. Las raciones son pequeñas (excepto la ensaladilla que además está buenísima) pero en mi opinión son perfectas para no salir empachado pero sí satisfecho. La verdad es que estoy deseando que pasen unas semanas para que cambie el menú y volver a probarlo.