Lamucca - Prado en Madrid

Sitio pintoresco. Comida pizza y hamburguesas. Los mojitos no estaban mal pero mucha hierba e ron para mi gusto. Solo tomamos dos copas

Un sitio muy agradable para tomar unas cañas y unas tapas. También se puede comer pero eso no lo probamos en esta ocasión.

Almorzamos hoy, un local precioso, muy bien decorado, limpio y perfecto, los baños es algo a destacar, no todos los restaurantes cuidan este enorme detalle, aquí si, impecables. Comimos el menú del día, 15E por persona, platos bien presentados y bien preparados, todo muy rico. La atención del personal, impecable, da gusto cuando te atienden así.

Me ha encantado el sitio, la comida estaba muy buena, el servicio es momentario, especialmente Lis que nos ha hecho un servicio increible ademas de ayudarnos con dudas ajenas al establecimiento

Un sitio muy agradable, tranquilo, con muy buena comida a muy buen precio, muy recomendable.

Sitio excepcional. Comida de calidad a muy buen precio. Ambiente agradable.

Excelente lugar cerca de Sol y de Neptuno, muy bien ubicado. Tiene mesas adentro y afuera. Nos sentamos adentro y pedimos 3 pizzas, todas ellas muy buenas, el risotto de rabo de toro excelente, la hamburguesa vegana con el pan aparte para evitar contaminación cruzada y la Milanesa. Todo riquísimo un servicio rápido y atento y precio normal dentro de la zona.

Le pongo 3 estrellas porque te sirven una tapa con pan y aceitunas cuando pides la bebida que no has pedido ni te han consultado si la quieres y que se interpreta que es una cortesía del restaurante peeeeero luego te la cobran!!! Eso no es legal en España. Resto, bien. Comida rica y personal agradable pero te llevas una sensación agridulce con este detalle malintencionado.

Cenamos aquí una noche durante nuestro viaje a Madrid. Lo habíamos visto mientras estábamos de excursión y estaba cerca de nuestro hotel, así que fuimos caminando, pero no habíamos reservado. Al principio dijeron que estaban llenos pero que podían ofrecernos la mesa en la puerta. Es difícil describir esa mesa ya que no está afuera en la calle ni adentro del restaurante; está literalmente en una especie de área de porche por donde todos los que entran o salen pasan. Dije que no y me fui caminando. En ese momento, dos personas salieron del restaurante y nos dieron esa mesa; el chico de la puerta fue amable y trató de hacernos lugar. Tuvimos un buen servicio y la comida estaba bastante buena. Comimos Pad Thai y un par de entrantes junto con un par de jarras de sangría. Este lugar estaba bastante concurrido pero tuvimos un servicio rápido y eficaz y la comida era bastante buena en general. Lo recomendaría.

Cocina bien resuelta y servicio eficiente en las peticiones y quizás un poco demasiado eficiente en la retirada de platos (el no esperar a que los comensales acaben puede ser efectivo para acabar antes el servicio pero no ayuda a que el comensal se sienta en día no laborable). Las mesas para las comidas en pareja están genialmente dispuestas para poder intervenir en las conversaciones ajenas. En suma.... Buen ambiente para grupos y familias, quizás no tanto para visitas en pareja. En el conjunto buena experiencia