La Vinería Gastrobodega en Lerma

parada en mitad de viaje a Bilbao y paramos en Lerma. Preguntamos en una tienda donde podíamos comer bien y nos recomiendan este restaurante. El servicio, genial. Simpáticas, amables… un 10 el menu del dia 19€. Los primeros fueron morcilla de Burgos con pimientos de piquillo, judias blancas y sopa castellana (para 4 personas), imposible decidir que estaba mas rico. Una autentica delicia. Segundos: carrilera de cerdo al vino tinto, regut de toro en salsa y churrasquitos de cordero. Dios mio, tierno, bien hecho y absolutamente delicioso todo. Postres tartas de queso muy caseros, tarta sacher y yogur también casero. otro 10 para los postres. Asi que si, mis cinco estrellas están mas que justicadas. no podeis pasar por este precioso y frio pueblo (hace un frío que pela) son probar el menu de este sitio.

Comida espectacular todo buenísimo 100/100 recomendado trato inmejorable profesionalidad Tania un encanto de camarera sabe muy bien hacer su trabajo volveremos sin dudarlo

Este fin de semana hemos celebrado un Retiro en Lerma y las comidas y cenas las hemos llevado a cabo en este restaurante, que conocimos en verano casi de casualidad, pero que nos enamoró por la buena cocina, la variedad de su menú y su carta, las facilidades que te dan... y sobre todo por la profesionalidad y el buen hacer de las personas que allí trabajan. Servicio rápido pero manejando muy bien los tiempos, y muy amables y flexibles. Sin duda volveremos, merece mucho la pena.

Experiencia de 10, la comida espectacular, un sabor único, la atención del personal una maravilla y el lugar precioso. En resumen un 10/10

PERFECTO!!! Nos permitieron comer dentro con nuestra perra, y pusieron un cuenco con agua para ella. La comida deliciosa, el precio correcto y el trato inmejorable. Totalmente recomendable!!!!

Paramos a comer,menú 19 euros,buenísimo sin duda un acierto total

Un personal muy amable, la comida muy rica y nos hacen sentir que estamos en nuestra casa.

Junto a la plaza mayor. Un servicio exquisito. Buen producto y menú variado.

Llegamos aquí con la idea de comer algo ligero, especialmente unas raciones. No pudo ser porque al parecer no se servían a esa hora. Finalmente nos decantamos por unos pinchos de 🍳🥔 tortilla de patata. No estaban mal pero por debajo de nuestras expectativas. Cuestión de gustos. El establecimiento está muy bien ubicado, con una terraza muy tranquila en una de las plazas de la parte antigua. En general, buena experiencia. Disfrutamos de esta pausa en Lerma.

Tienen menú fin de semana a 25€ muy rico. Varios platos a elegir. Mi hijo es celíaco y nos informaron que platos podía comer que eran la mayoría. La única pega es que no tienen pan sin gluten. El personal muy amable.