La Raquetista en Madrid

Muy bien todo. Servicio, vinos por copas, aperitivo comida, ambiente. Muy muy bien.

Muy buena atención, muy bien la comida. Para repetir. Ambiente muy agradable. Y buenos precios, no se dispara.

Mi experiencia en [LA RAQUETISTA ] fue excepcional. Desde el momento en que entré, me sentí acogida y atendida .. El ambiente era cálido y acogedor, con una decoración que reflejaba perfectamente la esencia de la buena cocina . El Rape fue increíble. La presentación era atractiva y el sabor era excepcional. Los ingredientes frescos y de alta calidad se notaban en cada bocado. El servicio fue impecable. El personal era atento y conocedor del menú, fuimos atendidos por (DANI ). quien no dudo en ayudarnos a elegir los platos perfectos. La atención al detalle y la rapidez en el servicio fueron notables. El restaurante tiene un ambiente acogedor y elegante. La decoración es sofisticada y el ambiente es relajado, lo que lo hace ideal para una cena romántica o una reunión con amigos. El precio es razonable considerando la calidad de la comida y el servicio. Me pareció una excelente relación calidad-precio. Definitivamente recomiendo [LA RAQUETISTA] a cualquiera que busque una experiencia gastronómica de alta calidad. El personal es amable, la comida es deliciosa Si estás buscando un restaurante que ofrezca una experiencia culinaria excepcional, LA RAQUETISTA] es una excelente opción. No dudes en visitarlo y disfrutar de la deliciosa comida y el servicio impecable.

El milhojas y el pulpo están buenos. Con el trato no nos sentimos cuidados. Entendemos que estábamos avisados de que a las 15:00h llegaba otra mesa, pero es muy innecesario que 20 minutos antes nos pongan otra silla en la mesa y pregunten por el postre invitándonos a irnos. Para mí tiene más valoración que la que merece.

Los torreznos impresionantes, riquisimos, la ensaladilla también estaba muy buena, además llegamos y ya habían cerrado la cocina, pero torreznos si que nos pudieron hacer, que realmente era a lo que íbamos, muy majos¡¡¡¡¡

Cocina deliciosa con recetas que parten de lo tradicional con leves variaciones. Los productos son de gran calidad. Sin duda, toda una experiencia gastronómica que espero poder repetir cuando vuelva a Madrid. Buen servicio, ya que la camarera estuvo atenta en todo momento, sin agobiarnos y nos hizo buenas recomendaciones. ¡Todo un placer para los sentidos!

El local es pequeño, así que recomendaría reservar, pero eso también le da un ambiente acogedor. La atención del personal ha sido muy buena en todo momento. Lo que más me ha gustado ha sido el canelón de pularda, que estaba espectacular, y el lomo bajo, muy sabroso y en su punto. Me he quedado con las ganas de probar los torreznos, así que ya tengo excusa para volver. Sin duda, un sitio al que merece la pena volver.

Es un clásico de la zona. El servicio es atento. La carta de vinos reducida pero aceptable. No me.gusto nada que nos echaron después de comer, no nos sirvieron una copa para la sobremesa.

Yo ya conocía el otro restaurante, La Raquetista en La Habana. En éste la carta es similar, sólo que sin incluir los platos más caribeños. Pedimos lo siguiente: - Pan rústico - 1 botella de agua y 3 de cerveza - 1 botella de vino verdejo Truhán - 1 ración de ensaladilla rusa de ventresca de bonito - 1 ración de patatas bravas - 2 platos de rabo de vaca al curry massaman - 2 platos de canelones de pularda - 2 torrijas de sobao - 1 copa de mango fresco, su sorbete y crema de coco Todo nos gustó bastante, aunque más el rabo de vaca que los canelones, según los que pidieron estos últimos. Las cantidades fueron más que suficientes. El tiempo entre plato y plato igualmente sin mucha demora. Al final la cuenta fue de 160€, o sea, a 40€ por persona.

Es un restaurante donde no se come mal pero es uno más de los muchos que te puedes encontrar en Madrid.El arroz con gambas sin entusiasmo,el canelón de pularda no me gustó,carta bastante corta y postres aceptables.No me gustó las mesas tan juntas.Si no vas no te vas a perder nada del otro mundo.