La vuelta a los orígenes de la cocina más tradicional; las brasas con un ambiente cosmopolita en plena milla de oro de la restauración.
Lo que nadie se puede perder: carnes y pescados a la brasa de carbón de encina, platos tradicionales, elaborados con un toque moderno y el mejor producto del Grupo La Máquina.
Horario
lunes: 0:00-2:00, 12:30-2:00
martes: 12:30-2:00
miércoles: 12:30-2:00
jueves: 12:30-2:00
viernes: 12:30-2:30
sábado: 12:30-0:00
domingo: 12:30-16:30
LUX Madrid despierta con una carta que da ejemplo de exigencia, innovación, elegancia y sofisticación. Muy presente la cocina asiática, para la cual se ha contado con el asesoramiento de chefs expertos en comida japonesa que han dado forma a la insólita propuesta que el restaurante ofrece en las cocinas vistas de showcooking. Platos y recetas de cocina española, asiática, italiana y mexicana. Sabores, aromas, texturas y matices de aquí y allí, que llegan a la mesa de la mano de un servicio atento y profesional, con formación y experiencia.
Soy asiduo del grupo la Maquina y normalmente he salido satisfecho por calidad y servicio. Salvo las dos últimas ocasiones que he ido a la Parrilla de la Máquina, especialmente hoy. El servicio de los camareros correcto. Pero no es aceptable que sirvan unas cocochas, 34 € en carta, frías, que las devuelvas y te sirvan otras templadas y con textura de cuero. Incomestibles. Las chuletas de cordero algunas quemadas. En fin, no se puede cobrar producto y elaboración como restaurante de cierta categoría y servirlo como tasca. También se muere de éxito. N9 obstante hay que resaltar que no cobraron las cocochas e hicieron una rebaja en la cuenta admitiendo los evidentes fallos.
El ambiente del local es excelente: se está muy tranquilo y no hay ningún murmullo. Quiero destacar especialmente la atención de Elien y Daniela, que ha sido impecable. Han estado pendientes en todo momento y su trato ha sido muy amable
Chuletón, navajas, jamón - todo muy rico. Terminamos con una tarta de queso. Tomamos un par de copas de vino. Algo caro, pero no decepciona. Habían más cosas en la carta que se veían riquísimas.
Fui con mi pareja a celebrar mi cumpleaños y tal como imaginábamos el restaurante no nos defraudó. La comida excelente y el ambiente muy cuidado y acogedor. Saidt, el camarero que nos atendió, fue muy profesional y atento. Lo único negativo de nuestra visita fue la actitud incomprensible y sorprendente de la persona que nos asignó la mesa a nuestra llegada. Era un tipo extremadamente antipático y desagradable y nos hizo sentir un poco incómodos. No se entiende como puede haber personas así atendiendo a los clientes y mucho menos en un restaurante de esta categoría.