La Gamella en Madrid

Deliciosa comida, ambiente super agradable y muy buena atención. Muy recomendable

Probando burguer SMASH con ka familia!!!!ESPECTACULAR🤩🤩🤩🤩🤩

Nos encantó, buena cocina, volveremos a seguir disfrutando de sus platos!

Excelente servicio, mucho más tranquilo que en los puntos calientes cerca del parque y excelente comida.

Magnífico restaurante en una zona única de Madrid. Lo conocemos desde hace más de treinta años ... casi toda una vida, y siempre hemos disfrutado de los momentos que pasamos en este lugar. Si te gusta el Steak Tartar, este es tu sitio, aunque la carta ofrece muchas otras opciones deliciosas. Muchas gracias a todo el equipo por vuestra atención y vuestra profesionalidad. Siempre es un gusto visitaros.

Fuimos a celebrar un cumpleaños y la verdad que muy lindo todo para hacerlo en pareja ,ambiente espléndido y comida buena. La única pega que pongo es el pan servido en el steak tartar,hubiese estado mucho más rico saboreando este plato con pan de lámina de cristal y no de bimbo. Por otro lado el chuleton que se les sirvió a mi acompañante aunque estaba bueno , si que es verdad que con una buena salsa hubiese entrado mejor. Lo que si no pongo pega es en el postre ,en este caso una tarta de queso sobrasada y muyyyyy rica 😋. La camarera excelente ,nos recomendó un vino genial para la carne .

Comida de muy buena calidad. Servicio bueno. Relación calidad/precio buena. Para repetir

Almorzamos con dos niñas. Comida excelente y muy buenos platos fuera de carta. Cuidado con las chicas a las que les han ofrecido varios platos para preparar inmediatamente (pasta, pollo, hamburguesas). Personal muy amable. Se recomiendan los tartares. Absolutamente vale la pena intentarlo.

Ayer tuve el placer de cenar en La Gamella y solo puedo decir que fue una experiencia espectacular. Desde el momento en que entré, el ambiente acogedor y el trato del personal hicieron que me sintiera como en casa. Pero lo que realmente me conquistó fue el Steak tartar al Jack Daniels (en mi opinión es el mejor steak tartar del mundo) y las croquetas (de chipirones en su tinta, chuletón y cecina), sin duda las mejores que he probado en mucho tiempo. Crujientes por fuera, cremosas por dentro y con un sabor que te hace querer pedir otra ración de inmediato. Se nota que están hechas con ingredientes de calidad y mucho cariño. También los rollitos de morcilla estaban espectaculares. El resto del menú también estuvo a la altura, con platos bien elaborados y llenos de sabor. Sin duda, un lugar al que siempre vuelvo y que recomiendo a cualquiera que quiera disfrutar de una comida deliciosa en un ambiente inmejorable.

Muy buena experiencia gastronómica ,un trato familiar y la comida de productos de calidad. Recomendado 100% Por otra parte muy bien trabajo de los jefes del restaurante como de los trabajadores