La Casa del Abuelo en Madrid

ayer viernes santo y como es tradición salimos a ver alguna de las procesiones que recorren las calles de mi maravilloso y precioso Madrid para terminar comiendo el típico bocadillo de calamares y que mejor lugar que la típica taberna de EL ABUELO, pero cual fue nuestra sorpresa que una vez que nos traen los bocadillos resulta que no son calamares, sino los despojos de algo parecido a los chipirones, lo cual se lo hago saber a la señorita encargada del local y su respuesta es que hay dos tipos de bocadillos, mentira ya que en la carta solo hay bocadillos de calamares y aunque hubiera habido de dos tipos, si hemos pedido calamares, quiero que sean calamares y punto, después de discutir y sentirnos engañados como si fuéramos guiris, extranjeros o simplemente jilipollas, la hago saber que no somos ninguna de ellas, si no que encima somos más madrileños que el oso de la puerta del sol y que le va a engañar a quien yo la diga, es más el personal malisimo, desagradables, lentos y sin tener ni idea de servir ni atender y luego se quejan los empresarios que no hay profesionales que pena, igual es que no quieren pagarlos como se merecen ya que haberlos, los hay y muy buenos pero igual prefieren pagar poco y si tienen lo que tienen y no se dan cuenta que los que pierden son ellos, pues este que escribe no volvera nunca más y será un cliente menos. VIVA LA HOSTELERIA.

Muy buena comida a metros de puerta del sol

Perfecto, muy bueno el bocata de calamares y buen servicio, El camarero Abraham muy atento en todo momento

Servicio amable y rápido, auténticos calamares a la andaluza y muy buenas croquetas con buena relación calidad-precio.

3 sobre 4. El pulpo a la gallega en sí solo está "bien", pero también cogimos gambas al ajillo y el pulpo con salsa de gambas nos dejó boquiabiertos. ¡Excelente! La ración de gambas es muy pequeña.

Estábamos aquí para probar las gambas en aceite de ajo, ya que dicen que aquí saben mejor. Quizás nuestras expectativas eran demasiado altas, pero nos decepcionó. Los camarones estaban bastante blandos, se deshacían y apenas tenían sabor.

Barra y restaurante, plato tipico las gambas al ajillo y mojarlas con un panecillo tambien excelente. Muy recomendable!

La tortilla española, las gambas al Ajillo estaban bien. Pedimos otro artículo pero no llegó. Lugar turístico muy concurrido.

Seguimos la recomendación de camarero y pedimos gambas al ajillo y un absoluto acierto, al igual que el bocadillo de calamares con pan de tinta de calamares! Volveremos!

Abraham de Propatria, Venezuela, fue el mejor camarero que tuvimos en Madrid en éste viaje. Nos ayudó a elegir las maravillas del menú (que ya es mucho que decir, porque todo es buenísimo) Cuando pagamos, el señor y la señora de la caja fueron muy majos también. Nos echamos una buenas risas. Las mejores gambas y el mejor arroz lo tuvimos aquí. Tanto que volvimos para cenar después de comer aquí el mismo día. ¡Gracias, chicos!