La Cantonada en Barcelona

Tengo la sensación de que el 3,9 se debe a que la gente esperaba un lugar más sofisticado dada la ubicación (aunque, claro, podría estar equivocado). Lo cierto es que este es un lugar popular durante todo el año, y este tipo de lugares son imprescindibles. Es bueno parar en un sitio sabiendo qué esperar y tener la satisfacción de no ser estafado. Sobre todo si la comida está a la altura.

Un pequeño y agradable restaurante cerca de la estación de autobuses con un parque en frente y precios moderados y comida muy sabrosa.

Solo fuimos por dos Gintonics comunes y corrientes (Segrams y Beafeeter). Estuvieron bien, pero 9€ cada uno nos pareció demasiado.

No vayan por las noches. El personal es mucho más grosero y escatiman en el servicio. Pidan solo el menú del mediodía: la comida es excelente y la relación calidad-precio es excelente. No vayan por tapas ni hamburguesas, la verdad es que no sirven suficiente. Esta noche simplemente ignoraron mi opinión; solo dije que unas patatas más o una ensalada al menos harían que una hamburguesa mereciera la pena, en lugar de quedarme con ganas de más comida. Pero no les importó y solo dijeron que era Barcelona. Me trataron como a un turista cuando suelo venir por el menú y las ofertas de desayuno. No volveré más.

Tomar un café por la mañana a partir de las 9h es agradable. Buena ubicación y situación de cara a aprovechar bien el buen tiempo. Han reducido lugar en la terracita y con amabilidad y sentido común se atiende. Mejor preservar un espacio mínimo de veinte minutos para mostrar mayor interés en vaciar la mesa.

Pequeña y acogedora tienda. Personal amable. Me detuve aquí para tomar una cerveza ambulante. Precios justos.

Empezo con el trato que fue súper cercano y profesional. Menú de medio día bien hecho. Excepcto por la salsa del pollo, todo nos ha gustado bastante. Excelente ensalada

¡Excelente relación precio/calidad/servicio! El menú es muy honesto... ¡Gracias!

Hemos comido genial a muy buen precio, volveremos!

La comida me ha gustado, un menú asequible y rico Pero los gritos de parte del personal y la música excesivamente alta no han ayudado a disfrutarlo