La Canica en Madrid

Estuvimos solos un jueves por la noche unas 14 personas de la empresa, atención de Eduardo..creo, un 10, comida otro 10, no es de los más baratos, pero vale la pena.

El restaurante esta bien, tiene entrantes bastante buenos, platos principales buenos. A veces muy lleno a veces medio vacio. El servicio muy amable, aunque algo desatendido.

Estuve aquí dos veces la semana pasada y tuve una muy buena experiencia. El personal es muy amable y la comida es simplemente "increíble". Volveremos seguro y lo recomiendo encarecidamente.

Es un restaurante que nunca me ha defraudado. Platos originales y deliciosos. Buen servicio. A recomendar.

Ambiente fantástico , atención que nos dio Gabriela muy buena , lo único que los postres algo sencillos y algo caros para lo que eran , las carnes y los entrantes muy recomendables

El restaurante está muy bien situado, es muy bonito y el servicio es muy amable. La cocina creo que necesita mejorar, algunos platos estaban muy buenos, otros no estaban muy sabrosos, pero lo del pan de hamburguesa fue de juzgado de guardia porque estaba como una piedra.

Quiero expresar mi más sincero agradecimiento a todo el equipo de La Canica: desde el maître, los camareros y camareras, hasta el personal de cocina, todos hicieron de nuestra celebración una experiencia inolvidable. En especial, quiero destacar la atención de Eduardo, quien estuvo siempre atento a cada detalle, haciendo que nos sintiéramos realmente especiales. Organizamos una celebración con mi familia y un grupo de 30 personas, y no puedo estar más satisfecho con el trato recibido. La atención fue impecable, amable y profesional, siempre con una sonrisa y disposición a ayudar. La comida, por su parte, fue una auténtica experiencia gastronómica. Cada plato fue elaborado con gran cuidado y creatividad, y todos mis invitados quedaron fascinados con la calidad y el sabor de cada uno de ellos. Sin duda, La Canica superó nuestras expectativas, convirtiendo nuestra reunión en un momento memorable. ¡Volveremos sin duda alguna!

Perfecto. El tartar de Atún con crujiente de arroz...... sin palabras. He ido varias veces ya.

Da igual las veces que visite este restaurante, que siempre acabo sorprendiéndome de algún plato o de algún detalle. La comida estaba exquisita y la relación calidad-precio es muy buena. Por poner una pega, nos ofrecieron un poco de pan y aceite al principio para abrir boca y el aceite era de envase de plástico monodosis, que resta imagen y calidad a lo que este restaurante proyecta. Os recomiendo tener un buen aceite de primera prensada como Oro de Bailén. O al menos poner aceiteras. Pero en general la experiencia es muy buena siempre que voy

La comida está muy bien elaborada y el servicio muy atento.