Kappou Makoto en Murcia

Fue toda una experiencia, un menú enfocado a la cocina japonesa con matices propios de la tierra como el chato murciano en sus platos, el servicio es en mesa/barra por grupos de unas 15 personas alrededor de la cocina. El ritmo de cocina y el servicio perfecto. Eso si la lista de espera creo que está cerca del año...

I N E F A B L E servicio muy amable de Silvia, experiencia gastronómica de lujo. Ha sido todo un placer volver y tomar otro menú totalmente distinto y seguir enamorándome del lugar, de la cocina, y de todo lo que le rodea a esta taberna japonesa.

Una experiencia inolvidable en Kappou Makoto (Murcia) Un espacio acogedor que te transporta directamente a Japón nada más cruzar la puerta. En Kappou Makoto se disfruta de la auténtica tradición japonesa, fusionada con productos locales de una forma magistral. Cada plato es una obra de arte, y el ambiente invita a saborear cada momento. Es difícil expresar en unas líneas lo gratificante que resulta la experiencia: simplemente hay que vivirla. Gracias, Makoto, por crear un lugar así, donde se respira pasión, respeto por la cocina y un amor genuino por el detalle.

Es una experiencia para hacer. Muy buena comida, el personal profesional y agradable. Precio adecuado para lo esperado

Izakaya imprescindible en Murcia 🤩 Una experiencia inmejorable con un único menú Omakase. Te dejas llevar íntegramente por el chef, el cual utiliza productos de proximidad muy bien trabajados y unas terminaciones excepcionales en boca. El recibimiento por parte de Silvia es magnífico, te hace la velada muy amena, atenta a sus 14 clientes en todo momento sin dejar ningún cabo suelto. Makoto, el chef, sin duda sublime, verlo trabajar es un verdadero placer. Un menú que dura aproximadamente 3 horas, con 11 pases, cada bocado mejor que el anterior; nada se hace pesado y el ambiente acompaña en todo momento. Buena carta de bebidas, donde incluyen grandes vinos, cervezas japonesas y variedad de sake.

Desde hace un tiempo había escuchado hablar de Kappou Makoto, un nombre que evocaba una experiencia culinaria única y cuidadosamente elaborada. Era algo que deseaba vivir personalmente, y en tan solo cinco días se presentó la oportunidad de hacerlo. No la dejé pasar. La experiencia resultó verdaderamente extraordinaria. Desde el momento en que crucé la puerta del restaurante, me envolvió una sensación de paz y serenidad. La ambientación, tanto por su diseño como por la música de fondo, crea un entorno armonioso que invita al disfrute pausado. Cada plato constituye un universo en sí mismo, una experiencia sensorial completa que combina aroma, sabor, presentación y técnica. La explicación que acompaña a cada elaboración permite apreciar aún más el cuidado y la dedicación con que se conciben los menús. Además, tuve la fortuna de compartir la velada con personas sumamente agradables, algo por lo que me siento especialmente agradecido. Si busca vivir una experiencia gastronómica oriental inolvidable, que despierte los sentidos y deje huella, Kappou Makoto es una elección inmejorable. En su cuenta de Instagram informan con frecuencia sobre disponibilidad y reservas; sin duda, merece la pena estar atentos. Gracias, Kappou Makoto. Estoy seguro de que volveré.

Una cocina deliciosa. La experiencia de ver como cocina cada uno de los platos, te hace experimentar cada plato de forma más intensa. Utilizan productos frescos de cercanía. El servicio duró casi 3 horas y fue impecable.

Una experiencia verdaderamente inolvidable en todos los aspectos. El trato recibido y el esmero en cada detalle son excepcionales. Tanto el chef Makoto como Silvia ofrecen una atención impecable, resolviendo cualquier duda con amabilidad y brindando siempre recomendaciones acertadas. Desde el momento en que se accede al restaurante, se percibe un ambiente de paz y serenidad que permite desconectarse por completo del exterior. Sin lugar a dudas, una representación perfecta del equilibrio entre gastronomía, atención y experiencia.

Una experiencia que hay que disfrutar

No sé puede dejar degustar sake con los platos, la sumiller aconseja según los gustos. MAKOTO te da de comer, no hay carta. Platos con materia prima de calidad, de temporada y de la zona. La experiencia es similar a una Izakaya japonesa.