INNSiDE by Meliá Alcudia en Alcúdia

Muy buenas instalaciones, comida de muy buena calidad y variedad; kids club muy bien con cosas chulas todas las noches y juegos de agua muy divertidos, hemos ido con dos niños de 3 y 5 años y se lo han pasado genial.Playa a 3 minutos. Recomendable 100%

El trato de la recepcionista Tania muy bueno, el hotel más bonito que entretenido, el buffet de la cena termina a las 22:00 , si te entretienes, no cenas, los dj y cantantes que actúan por la tarde-noche, terminan a las 22:30 y la piscina cierra a las 19:00, con lo que a partir de esa hora, solo queda dar vueltas(el hotel no es tan grande)o subir a la habitación. La comida del buffet estaba buena y el desayuno hay de todo. Tampoco sabíamos que la bebida del buffet se pagaba aparte, y los precios fueron muy altos para una cerveza y una Cocacola, lo mismo con los cócteles en el bar del hotel. Así no merece la pena tomar nada en el hotel. Y el retrete de la habitación estuvo los 5 días sueltos, a pesar de decirlo en recepción. Lo dicho, más bonito que bueno.

El hotel está bien situado, las habitaciones son cómodas y con una gran terraza. El servicio es bastante flojo. Desde la recepción al bar de la piscina y el comedor, la mayoría son un grupo de chicos que parece tener 15 años y no tiene experiencia ninguna y sin muy poco profesionales. Preguntamos cosas básicas sobre las playas de la zona y no saltan nada, como si oyeran los nombres por primera vez. Las mujeres que operan la plancha en el desayuno se hablan a gritos y pelean a voces delante de los clientes cada día, muy incómodo. Además están todos tan acostumbrados a que sean todos guiris que se ponen a hablar entre ellos de cosas nada apropiadas sin importar que hay clientes españoles también. Está genial que se dé un ambiente desenfadado y oportunidad a los jóvenes, pero tiene que haber además encargados o gente con profesionalidad y experiencia que los guíe. Servicio muy mejorable, a excepción de la chica de la limpieza de las habitaciones.

Este hotel es uno de los mejores en los que me he alojado, muy limpio y con una decoración preciosa. Las habitaciones son muy amplias y se limpian a diario con toallas limpias y botellas de agua de cortesía. Todo el personal es muy amable y acogedor. Tania, de recepción, fue excelente; nada era demasiado. Mi hija de 4 años quería ir a recepción todos los días para hablar con ella. Todo el personal del club infantil fue increíble, muy paciente y entusiasta. Siempre hay muchísima variedad de actividades. Noa, del club infantil, es una joya, una persona encantadora; incluso se acordó de mi hija de nuestra visita del año anterior. La comida para el desayuno y la cena siempre estaba fresca y con mucha variedad. El bar de la piscina también es muy bueno; un día pedimos pizza y patatas fritas y llegaron enseguida. Buena selección de bebidas (cócteles, cerveza, refrescos, etc.). La ​​ubicación es excelente, a solo 5 minutos a pie de la playa. Hay un montón de tiendas y restaurantes decentes cerca. El traslado al aeropuerto dura aproximadamente entre 45 y 60 minutos. Mi única pequeña queja sobre mi estancia es que la gente madrugaba mucho para reservar tumbonas, aunque la piscina no abre hasta las 10 de la mañana, lo que dificultaba que las familias, especialmente con niños pequeños, encontraran sitio para sentarse junto a la piscina. En general, una experiencia fantástica y estoy deseando volver.

Es un buen hotel, pero no se ajusta del todo a lo que esperas de un hotel del grupo Meliá de 4 estrellas y con lo que cuesta. Está renovado, está limpio y todo el personal es súper amable. A nivel personal en las comidas estaba bien, pero en tema limpieza en verano se queda escaso debido a las salidas y entradas. Un día a las 16:30 la habitación sin hacer, otro día no quedaban toallas de playa limpias, detalles de esta categoría. Para mi una sorpresa fue que no ofertan el hotel como un resort familiar en la web, y aunque no esperaba que no hubiera niños, la verdad es que es un resort familiar, que de haber sabido hubiera replanteado mi elección. Está pensado para familias que no quieren salir de allí y está bien pero como digo, no se vende como tal. Respecto a la comida, está bien es buena calidad, pero un poco escasa en opciones. De nuevo digo, correcto pero no lo que esperas en esta categoría. Se ajusta mas a un resort de 3 estrellas que un Meliá de 4, sobre todo con el precio pagado. Por último, precios del restaurante bastante bien ajustados a la demanda, pero no así de las bebidas de las cenas y comidas. 5 euros un litro de agua no se ajusta a la realidad del mercado, entiendo que deja margen, pero normal que había gente metiendo agua de fuera.

Me a encantado,muy bonito y familiar,un servicio excepcional,sobretodo la atención de una recepcionista llamada Tania que me ayudo en todo lo necesario para facilitarme tema parquecuna para bebe.

Fue muy cordial y agradable, su nombre Tania

Tania fue encantadora y muy servicial

El sitio es espectacular. La comida, no tanto. Hay que ir, si o si, a descubrir este rincón y poder tomarte algo en la terraza. Eso si, recomiendo más poder tomarte un café por la mañana o una cerveza al atardecer e irte que comer en el sitio. Todo comida de “guiri”. Servicio bueno y buen ambiente. Vistas increíbles!

Espectacular y los camareros camareras una joya. Un lugar de ensueño. Con bastante sitio para poder aparcar. Lo único menos bueno es que se llena muy pronto el restaurante. Pero si quieres venir se puede reservar