Imprevisto Restaurante en Barcelona

Tuvimos el menú de degustación de 10 platos, la verdad todo estuvo muy delicioso, muy bien elaborado cada bocado y explosión de sabores, empezamos con un cava y luego un buen vino rojo, todo es súper Gourmet pero créeme que quedamos súper satisfechos con todo, la chica y el chico que estuvieron atendiéndonos fueron súper amigables y muy atentos en todo momento, el sitio es pequeño y sencillo pero muy acogedor! Ya volveremos en nuestra próxima visita a Barcelona.

Un restaurante único. Tiene 2 menús el corto y el largo, nosotros hicimos el corto que ronda los 70€ y nos quedamos llenisimos. La particularidad del menú es que no sabes lo que vas a comer hasta que lo ponen en la mesa (imprevisto ;)). Nos gustó mucho.

Comida muy bien elaborada. Servicio muy eficiente y serio. Ambiente muy correcto.

Maridaje excepcional (vale la pena pedirlo) y platos bien preparados, todos muy buenos y unos de nivel espectacular. Destaco la zanahoria, el tartar y el salmorejo. El servicio fue muy bueno también, desde la llegada y hasta la despedida, y la explicación de platos y de maridaje fue muy detallada, se nota el mimo y el amor por lo que hacen. Muy recomendable. Para repetir.

Restaurante con comida de 10 y mejor servicio. Mi unica pega es la decoración del restaurante me parece un poco fría. Hemos pedido 10 platos y la verdad que un espectáculo de sabores y sus dos camareros súper súper atentos.

Tuvimos la degustación de 7 tiempos y la comida estuvo fantástica. El servicio fue impecable y la experiencia culinaria fue fantástica. Muy recomendable.

Sorpresa muy agradable. Primera vez que vamos Hemos hecho el menú corto en el que te tienes que dejar sorprender sin saber lo que vas a comer y la verdad es que sí que ha sido una sorpresa y muy agradable. Pequeños bocados muy bien hechos, muy sabrosos y con mucha técnica. En servicio muy bien gente muy agradable, los platos salen a muy buen ritmo. Si tengo que poner una pequeñísima pega que no desluce el conjunto es que me gustaría un poquito más de luz en las mesas. Pero quiero que quede claro que es una sugerencia y no una queja, he disfrutado mucho y vuelvo seguro.

Aunque nuestra reserva coincidió con la hora de apertura, recibimos una bienvenida excelente, que superó con creces nuestras expectativas. Ante todo, quiero agradecer al personal; fueron muy amables y atentos. Si hubiera una calificación de 10 estrellas, la habría otorgado sin exagerar. Elegimos el menú degustación de 7 platos. Dudaba si sería suficiente, pero fue más que suficiente. Lo recomiendo encarecidamente. Algunos platos se sirven crudos, pero no se preocupen, son muy comestibles y deliciosos. Un agradecimiento especial al caballero que, con cada plato servido, se tomó el tiempo de explicarnos los platos en francés e inglés. Todo fue más que perfecto.

Comida en general correcta pero sin más, algunas cosas a criticar y nada para recordar. No hay plato que digas que esta malo pero bastantes son propuestas típicas con ejecución plana como la tartaleta con tartar. Otros con errores de temperatura como el tartar de gamba, que todo en conjunto estaba casi helado, con un excesivo frio de nevera que mataba todo el sabor y podía haber sido un muy buen plato o la pasta que a pesar de tener un buen punto de cocción estaba fria. El steak tartar de lo mejor que comimos junto con el pato con mole y maíz que en sabor era excelente pero en textura un poco duro. No se si otra cocción o otra pieza le sentarían mejor a esa salsa. Los postres correctos pero me faltó algo mas goloso, me resultaron demasiado similares las texturas de los dos postres y me sobró comer pomelo y naranja sanguina en el mes de julio. Me hubiera gustado una propuesta mas con algo de temporada. El servicio como todo correcto. Se adaptan a intolerancias con agilidad y sin desviar en exceso el plato de la propuesta original, pero con puntos a mejorar. Como por ejemplo el hecho de que nos comenzaron a servir la comida cuando aún estábamos mirando la carta de vinos. Respondo a su respuesta: Cuestión de gustos es si la tortilla va con o sin cebolla, pero platos fríos de nevera o que te comiencen a servir un menú degustación cuando todavía estas mirando la carta de vinos no creo que sea una cuestión de gustos.

Buen Restaurant, vale la pena visitar. PROS: 1. Buena relación precio-calidad en la comida. (No tomamos vino por lo que no podría opinar sobre el maridaje). 2. Los sabores son en general muy cañeros, y reconoces perfectamente lo que estás comiendo, a diferencia de otros restaurantes con menús de degustación tan moleculares que a veces no sabes que estás probando. 3. El lugar es pequeño y el servicio amable. CONTRAS: 1. Solo un poco lenta la transición entre algunos de los platos, con pausas que a veces se hacen un poco largas.